La Guardia Civil ha detenido a una persona y desmantelado un taller clandestino de explosivos en Castilleja de la Cuesta, Sevilla, por los delitos de fabricación ilegal y depósito de explosivos, así como de riesgo provocado por explosivos u otros agentes.

Se trata, como ha informado la Guardia Civil en un comunicado, de la denominada Operación Piroxilo, donde se han intervenido casi 50 kilos de distintas sustancias precursoras de explosivos y otros productos químicos además del resto de elementos necesarios, entre los que destacan 22 rollos de mecha y 700 cerillas eléctricas (iniciadores).

El detenido tenía instalado en su domicilio, ubicado en un bloque de viviendas, un taller clandestino dotado de todo tipo de maquinaria y elementos necesarios para la fabricación de mezclas y artefactos explosivos, incendiarios o pirotécnicos, y fabricaba los artefactos de forma artesanal a base de mezclas de sustancias químicas precursoras de explosivos, que previamente adquiría al margen de la ley en el extranjero.

Con las sustancias precursoras y productos químicos intervenidos se podían elaborar distintos tipos de mezclas explosivas, pirotécnicas o incendiarias; todas ellas muy peligrosas por su poder destructivo.

La investigación se inició cuando la Guardia Civil detectó que el detenido estaba recibiendo envíos postales procedentes de países del este de Europa que contenían sustancias precursoras de explosivos que eran falsamente declaradas como productos para artesanía, lo que hizo sospechar del fin ilícito al que iban destinadas.

Se trata de una de las mayores incautaciones de este tipo de artefactos de fabricación artesanal y precursores de explosivos realizada hasta el momento en España, junto con la realizada en noviembre de 2019 en Miranda de Ebro (Burgos).