Agentes de la Policía Nacional han detenido en Zaragoza, Aragón, a cinco personas por estafa y pertenencia a organización criminal en el marco de la denominada operación Andes que comenzó en 2018. Decían recaudar dinero para luchar contra el cáncer infantil y para emergencias en el tercer mundo, pero utilizaban los fondos en su propio beneficio.

La investigación se inició con la denuncia presentada por la Asociación de Padres de Niños Oncológicos de Aragón (ASPANOA) contra las actuaciones opacas de una asociación que decía recaudar dinero para destinarlo íntegramente a la lucha contra el cáncer infantil.

Esta asociación, llamada Linceci (La Liga Nacional Contra el Cáncer Infantil), se publicitaba a través de una página web, revistas, venta de productos solidarios y diversos actos. Así, había recaudado fondos por importe de unos dos millones de euros en cuatro años. También operaban con otra empresa, destinada igualmente a la captación de fondos de donantes para actuaciones en emergencias con la que habían ganado tres millones en cinco años.

Entre ambas recaudaron más de cinco millones de euros mediante técnicas comerciales, a través de llamadas telefónicas, voluntarios a pie de calle y actos diversos.

Sin embargo, el dinero donado por más de 20.000 personas era destinado al sostenimiento de una estructura empresarial de la que vivían los detenidos y más de 40 trabajadores. De esta forma, el principal dirigente llevaba un alto tren de vida, con vehículos de alta gama y comiendo asiduamente en conocidos restaurantes.

Desarrollaban acciones de donaciones de juguetes, entregados por terceros, actividades lúdico-deportivas llevadas a cabo también con las aportaciones de terceros y otras actividades menores, cuyo único fin real era el de dar soporte publicitario a su actividad.

Los agentes, pertenecientes a la Brigada Regional de Policía Judicial de Zaragoza, han procedido al bloqueo cautelar de un apartamento en la playa, de un chalet en la montaña, de un piso en la capital aragonesa, cuentas bancarias y diez vehículos, entre ellos cuatro de alta gama, BMW, Jaguar y Jeep.

Asimismo, se ha intervenido un vehículo BMW del que era usuario el cabecilla de la organización, R.P.R., y un Toyota Corola, todos ellos usados a modo particular de la familia del principal investigado, y que se había pagado con fondos procedentes de las donaciones.

Los cinco detenidos han pasado este viernes a disposición judicial, decretando la autoridad judicial el ingreso en prisión de dos de ellos. Entiende de la investigación el Juzgado de Instrucción número dos de Zaragoza.