Los hechos, según el Consistorio de Utrera, sucedieron cuando "el perro iba sin la debida custodia de su propietario" y "cruzó de forma repentina una avenida", siendo atropellado por un vehículo cuyo conductor "no pudo hacer nada para evitarlo".
"Lamentable, las consecuencias que traen consigo el no prestar la debida atención a nuestras mascotas ha supuesto en este caso la muerte de esta y ha provocado un accidente de tráfico que podría haber implicado a más vehículos y de esta forma causar, además, daños a personas", recuerda el Ayuntamiento, exponiendo que el propietario del perro fallecido ha sido denunciado por una infracción "considerada como grave".
Mientras la citada normativa municipal comprende sanciones de entre 501 y 2.000 euros por el hecho denunciado, es decir "no prestar la debida diligencia en el cuidado y custodia de su mascota", el concejal de Seguridad Ciudadana, Francisco Campanario, ha lamentado la muerte del perro.