Hay zumerías en las que el batido estrella es el de espinacas: "Nos lo piden mucho los extranjeros", asegura una trabajadora de este tipo de locales, apostillando que "no pueden ser malos".

Desde la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria no están muy acuerdo; dicen que las espinacas contienen ácido oxálico y estos zumos superan la cantidad recomendada para nuestro organismo. En exceso, aumenta el riesgo de que tengamos cálculos renales.

"Muchos de los nuevos alimentos que nos venden como la panacea para todos los males tienen letra pequeña. Un consumo excesivo puede provocar problemas de salud y de seguridad alimentaria", asegura Ileana Izverniceanu, portavoz de la OCU.

Entre ellos, los tés verdes, que contienen dosis de catequina que, si se consumen en exceso, pueden provocar daños hepáticos. Jorge Jaldón, nutricionista, asegura que "muchos batidos detox pueden ser hepatotóxicos porque superan la cantidad de catequina que debemos tomar al día".

Desde oriente exportamos las setas shiitake. Ellos están acostumbrados a las dosis de yodo que contienen, pero los occidentales no, algo que les expone a sufrir dermatitis. La única solución es no comerlas crudas o poco cocinadas.

También preocupan los zumos y los productos extraídos del aloe vera por uno de sus componentes: la aolína, cuyo consumo en exceso tiene un efecto tóxico. No existe una cantidad mínima segura para los nutricionistas, que no recomiendan dejar de tomarlos, pero sí regular las dosis y no creer en sus efectos milagro.