Alrededor de 4.100 personas se han infectado al consumir un agua envasada contaminada en Barcelona. Los afectados sufren náuseas, vómitos, dolor abdominal pero tan solo una ha requerido hospitalización.
La empresa responsable ha emitido un comunicado en el que explica que ha abierto una investigación y que ha retirado hasta 6.000 garrafas repartidas en toda al área metropolitana de Barcelona y que está higienizando las fuentes. Por su parte, la Agencia Catalana de Salud ha tomado muestras de esa agua contaminada para determinar el origen del brote infeccioso.
"Me desperté con ganas de devolver, un poco de descomposición. Me enteré a las cuatro y media de la tarde cuando un encargado de la empresa nos dijo que les habían informado de que el agua estaba contaminada y que la habían marcado para rechazarla", explica un afectado.