Durante varios minutos, varios conductores pudieron ver cómo caía sobre ellos una lluvia de miles de rands, la moneda oficial de Sudáfrica. Según ha informado el 'Daily Mail', los atracadores abordaron el furgón disparando a los neumáticos. Sacaron a los vigilantes del vehículo y posteriormente instalaron cargas explosivas para forzar la apertura del portón.

Sin embargo, un error de cálculo de la potencia explosiva provocó que el techo y parte de la carrocería saliesen volando por los aires. El mal cálculo lanzó por los aires miles de billetes de cinco y diez rands. Los conductores, que estaban por la zona, aprovecharon para recoger el máximo de billetes posibles. A pesar del error, los atracadores consiguieron llevarse más de 100.000 euros, armas y material de seguridad.