Junts per Catalunya insiste: votará en contra de los reales decretos del Gobierno porque "no se han negociado" y la formación tiene discrepancias tanto en las formas como en el fondo de dichos decretos. Así lo volvió a expresar en la noche de este lunes el secretario general del partido, Jordi Turull.

Horas antes, 3l vicepresidente y portavoz de Junts, Josep Rius, exigía a Sánchez que retire sus tres primeros decretos ley y los pacte con Junts, antes de volver a presentar una serie de decretos "individualizados" para cada uno de los temas que abordan.

El Congreso inicia este miércoles el debate de tres decretos de contenido económico -el octavo paquete de medidas contra la inflación, la reforma del subsidio de desempleo y una norma ómnibus que incluye la ley de función pública-, cuya convalidación está en riesgo desde que Junts anunciara que votará en contra.

En la primera rueda de prensa de Junts Per Catalunya tras las fiestas navideñas, Rius reiteró que los siete diputados de su partido "votarán en contra" de los tres reales decretos, "aprobados deprisa y corriendo" por el Gobierno "sin haber cerrado un acuerdo con Junts".

"En esta legislatura no funcionará el 'a cambio de nada'. Junts no ha firmado un acuerdo de legislatura. Solo habrá estabilidad si hay avances en el ámbito nacional y en el ámbito social", dijo Rius, que alertó de que los decretos "agravan la infrafinanciación" de Cataluña, implican "un recorte de competencias de la Generalitat" y "ponen en peligro la aplicación de la ley de amnistía".

Por ello, exigió al Gobierno que "retire los tres decretos ley y los vuelva a presentar, negociados y acordados con Junts", de manera "individualizada para cada ámbito temático".

Esta misma mañana, la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, había mostrado optimismo ante la postura de Junts. Desde el Gobierno apuntaba a que todavía había margen para que la formación independentista decidiera apoyar los tres reales decretos, tal y como exponía en una entrevista concedida a TVE: "Sabíamos desde el principio que esta iba a ser una legislatura de diálogo. Cada norma que se quiera aprobar en el Congreso requiere paciencia y capacidad de entendimiento", ha indicado.

La vicepresidenta se mostró de esta manera "convencida" de que encontrarán "aquellos elementos que permitan convalidar un decreto que es para la gente". "Hay que dejar de pensar en elementos partidistas y pensar en el interés general", añadió.

Lo cierto es que, a pesar del sí de ERC a las mismas medidas, ahora mismo al Gobierno no le salen las cuentas. Necesita una mayoría simple para poder convalidar los reales decretos que llevará a pleno el próximo miércoles.