Restos de sangre en la valla fronteriza de Melilla, una imagen que podría repetirse muy pronto. El ministerio del Interior volverá a colocar alambres con cuchillas en la valla. Estas hojas afiladas causan profundos cortes en manos y piernas, y ponen en peligro la vida de los subsaharianos que intentan entrar en la ciudad autónoma.
Ya han empezado los trabajos en la valla fronteriza. Interior quiere evitar saltos como los que se han producido en los últimos meses. La delegación del Gobierno de Melilla ha reconocido que en la malla se instalarán 'concertinas', cuchillas entremezcladas con alambre. Aseguran que se colocarán en los lugares donde se producen más saltos de inmigrantes.
Este sistema no es nuevo, las cuchillas estuvieron instaladas durantes años. Tras la presión de las ONGs, y después de demostrar su peligro, el Gobierno de Zapatero las retiró en 2007.