Martorell ha explicado que su cliente ha acudido a la comisaría de la policía local de Vic, que lo había citado para interrogarlo, pero se ha acogido a su derecho a no declarar, entre otras cuestiones porque está muy afectado psicológicamente debido al gran revuelo causado por su acción.

En su atestado, que remitirá al juzgado cuando esté finalizado, la Guardia Urbana acusa al conductor de un delito de conducción temeraria, aunque el Ayuntamiento de Vic ha anunciado que también piensa denunciarle por incitación al odio y a la discriminación.

Sin embargo, el abogado insiste en que la actuación de su cliente "no es un tema ideológico" y recuerda que éste, vecino de Vic de 52 años, es una persona conocida en el municipio, y también por la propia Guardia Urbana, porque sufre trastornos depresivos de los que se trata con una medicación muy potente.

Según la versión del letrado, el conductor sufrió un fuerte ataque de angustia cuando circulaba por la calle Verdaguer, próxima a la plaza Mayor, que le llevó a arrollar las cruces amarillas en apoyo de los políticos presos y sigue sin explicarse por qué lo hizo.

El Ayuntamiento denunciará por un delito de odio al conductor

El Consistorio de la localidad catalana denunciará por un delito de incitación al odio al conductor que arrolló varias hileras de cruces amarillas, un vecino de la población que al parecer sufre algún trastorno mental y al que la Policía Local ha citado a declarar, asistido de su abogado.

La Policía Municipal ha abierto diligencias contra el conductor por los delitos de conducción temeraria y de daños, aunque el ayuntamiento ha anunciado ya que cuando la causa llegue al juzgado lo denunciará también por incitación al odio y la discriminación.

El hombre arrolló con su coche varias hileras de cruces amarillas que se habían plantado en la plaza Major de Vic en el marco de un acto de apoyo a los políticos independentistas.

Gracias a la colaboración ciudadana y a las imágenes del coche embistiendo la cruces, que se convirtieron en virales, los agentes han podido identificar al propietario del vehículo y presunto autor de los hechos, un vecino de Vic de 52 años que, al parecer, sufre algún tipo de trastorno mental.

De acuerdo con las primeras investigaciones, el conductor actuó solo, de forma espontánea, sin que su ataque a las cruces plantadas forme parte de ningún plan organizado. El conductor ha sido citado a declarar esta mañana en la comisaría de la Policía Local de Vic, asistido por un abogado, y está previsto que el atestado se remita al juzgado una vez los agentes concluyan sus diligencias de investigación.

A través de su cuenta de Twitter, la alcaldesa, Anna Erra, ha dado las gracias a los vecinos que han facilitado información para identificar al conductor y ha anunciado que el ayuntamiento seguirá reclamando su "coaccionada libertad de expresión".