Ciudadanos ha dado el pistoletazo de salida a sus primarias para elegir al candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid y que pilla al partido en una grave crisis, tanto en la región como a nivel nacional.

Ayer mismo el exvicepresidente regional Ignacio Aguadodio un paso atrás y anunció que renunciaba a liderar a los naranjas en favor del portavoz nacional del partido y diputado en el Congreso, Edmundo Bal. Lo hace después de varios días en los que la Ejecutiva del partido dudaba de su idoneidad para salvar a la formación de la debacle que se prevé en las elecciones, donde podría obtener menos del 5% de los votos y quedar fuera de la Asamblea madrileña.

Sin embargo, Bal tendrá que pasar por el proceso de las primarias, que parece un mero trámite burocrático ya que se trata del único candidato en liza. Todavía pueden aparecer nuevos nombres, ya que el partido ha dado hasta mañana a las 21:00 horas para que se presenten los candidatos "que cuenten con los requisitos generales" y, al menos, nueve meses de antigüedad.

El domingo comenzarán las votaciones telemáticas del candidato o candidatos que pretendan liderar la plancha naranja en las elecciones madrileñas. Desde las 20:00 horas del domingo 21 de marzo hasta las 20:00 horas del lunes 22 los afiliados de Cs podrán elegir al sucesor de Aguado al frente del partido.

Bal se presenta para que no gobiernen "los extremismos"

El presumible candidato, Bal ha asegurado esta mañana en una entrevista en Onda Cero que se presenta para que no gobiernen Madrid "los extremismos" ni los "populismos de derecha ni de izquierdas".

En relación con todas las encuestas que dan una victoria holgada a la todavía presidenta, Isabel Díaz Ayuso, Bal ha afeado la actitud "grandilocuente" con la que la candidata del PP vende que va a obtener una mayoría absoluta. Asegura que le "da un poco de sonrojo" y que los sondeos variarán conforme avance la campaña.

El portavoz nacional del partido,que negó en varias ocasiones que lideraría a los naranjas el 4M, ha asegurado que tomó la decisión después de que Aguado le llamara y le dijera que podría ser el candidato "más idóneo". Tras hacer "digestión mental" de la decisión, Bal optó por dar un paso al frente para "tirar del carro e ilusionar a la gente", cuando lo "cómodo" sería quedarse en el Congreso.

"Lo voy a dar todo para que Madrid tenga un gobierno sensato", ha señalado.