La Generalitat de Cataluña ha aprobado los acuerdos sobre la situación de emergencia por sequía para que entren en vigor, se prevé, a principios de febrero. Desde el Govern han matizado que aún no declaran la emergencia, sino que lo harán cuando lleguen al 16% de reservas de agua. No obstante, han destacado que desde el Ejecutivo regional ya se ha reunido con los gimnasios y clubes federados para comentar las próximas restricciones.

Las últimas lluvias, menos intensas de lo esperado -además, gran parte de las precipitaciones han sido en forma de nieve que aún no se ha deshecho-, no ha alterado la situación de los pantanos, que siguen bajando. Así, actualmente, las reservas en todos los embalses de las cuencas internas catalanas están en el 16,23%, ya rozando el límite del 16% a partir del cual se decreta el estado de emergencia.

La Generalitat decretará el estado de emergencia en el sistema Ter Llobregat -que abastece 202 municipios del área metropolitana de Barcelona y parte de Girona- cuando este llegue al límite del 16% de reservas, algo que previsiblemente ocurrirá este mismo enero, por lo que las restricciones entrarán en vigor a principios de febrero.

Así serán las tres frases

El plan de emergencia se divide en tres fases. En la primera, en lo que respecta a clubes deportivos y gimnasios, se podrán rellenar parcialmente las piscinas cubiertas de equipamientos deportivos y las descubiertas de deportes federados siempre que dispongan de un sistema de recirculación de agua, pero a cambio deberán ahorrar el volumen de agua equivalente al utilizado para rellenar las piscinas, por ejemplo, cerrando algunas duchas. Además, las dotaciones de agua se reducen a 200 litros por día y habitante para todos los usos (comercial, industrial, lúdico o personal).

Además, se prohibirá lavar los coches, excepto en aquellos establecimientos comerciales que cuenten con sistemas de recirculación de agua. Tampoco estará disponible el uso en playas de los lavapies y duchas y quedarán prohibidas las pistas de hielo (aunque sean temporales), fiestas de la espuma o los juegos de agua. También se impondrá la reducción del riego agrícola un 80% y el consumo de agua en la industria un 25%.

Para las fases 2 y 3 de la emergencia, previstas para los próximos meses si la situación continúa empeorando, las restricciones a los clubes se endurecerían, así como en todas las otras actividades, pues la dotación de agua iría bajando, hasta los 160 litros por habitante y día.

Por ejemplo, quedaría prohibido el riego de jardines y zonas verdes, públicos y privados, excepto en Fase 1 y Fase 2, que se puede hacer riego público de supervivencia de árboles y jardines botánicos si se hace con agua regenerada o freáticas. En la Fase 3 sólo se podrá regar con agua no potable para garantizar la supervivencia árboles de carácter singular o monumental.