Marcos Simón, hermano del coordinador del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha elogiado a su hermano por su labor durante la crisis del coronavirus en una carta publicada en el medio 'Heraldo'.

Marcos Simón ha querido reivindicar la labor de su hermano, a quien ha calificado con una persona cuya entrega "no está condicionada por intereses espurios ni por la presión que le rodea", sino cuya "motivación es su vocación de ayudar".

Simón ha comenzado su escrito apuntando que no suele ser usuario de medios de información, sin embargo, lleva "tres meses buscando el telediario y otras fuentes de noticias": "No falla, en pocos minutos oigo hablar a Fernando y me lleno de orgullo. No es solo que él sabe de lo que habla. Es mucho más", ha comenzado.

El hermano del doctor que cada día otorga los datos de la evolución de la pandemia ha afirmado que "es un asombro al ver su esfuerzo constante por explicar cómo están las cosas, por transmitir información veraz, sin interpretarla, sin utilizarla. Su respeto por quien le escucha, su esfuerzo por encontrar el equilibrio entre los términos técnicos y las palabras que permitan, a todos, entender lo que está pasando".

Ese, ha dicho, es su convencimiento de que "su entrega no está condicionada por intereses": "Cuando él lo hace no parece tener mérito, porque lo hace sonriendo, porque le quita importancia, porque no busca réditos. Siempre lo ha hecho así y lo seguirá haciendo. Se expone, no hay duda".

Y por este motivo ha asegurado sentirse "preocupado por él": "Hay insensatos que no se dan cuenta de lo que atacan cuando atacan a Fernando".

El hermano del doctor, que se ha sometido a numerosas críticas y que incluso ha sido demandado por su gestión de la crisis, ha querido reprender a quienes le han atacado: "No se dan cuenta de que desacreditar a Fernando con información falseada es peligroso. Peligroso para todos. Es muy peligroso que consigan hacer mella en él".

Porque, ha dicho en la carta en el citado medio, "Fernando nos está ayudando a todos y lo seguirá haciendo mientras tenga oportunidad de hacerlo".

Elogios por parte del Gobierno

A pesar de la férrea exposición a la que el doctor ha sido sometido durante los últimos meses, Fernando Simón no solo ha recibido críticas. Numerosos miembros del Gobierno, como el propio presidente o el ministro de Sanidad, han elogiado al hombre que se esconde tras la cara más visible de la pandemia.

En una tensa sesión de control al Gobierno en el Senado, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, se dirigía al PP para pedirle que felicitara a Ana Pastor y a Ana Mato: "A Ana Pastor por haber creado el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias y a la señora Ana Mato por haber nombrado a Fernando Simón, mi principal colaborador en esta situación".

No era la primera vez que Illa apoyaba públicamente a Fernando Simón. Cuando algunos diputados de Vox pidieron su dimisión manifestó su "orgullo de tener y contar con el doctor Fernando Simón como director y coordinador de centro de emergencias". Entonces quiso "subrayar el carácter de servidor público ejemplar que él ha demostrado en toda esta pandemia". "Es un orgullo tenerlo al mando", afirmó.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, también elogió públicamente a Fernando Simón en una comparecencia desde Moncloa. Quiso entonces hacer "un elogio público a dos personas que encarnan las mejores cualidades de nuestro país: el primero es un aragonés y el segundo es un catalán", relataba en referencia a Simón e Illa.

El presidente se refería entonces al coordinador del centro de Alertas y Emergencias Sanitarias como alguien que ha pensado "en el país más que en sí mismo, hasta cuando estuvo infectado por el mismo virus que combatía". "Es un funcionario, un servidor público a quien ni siquiera conocía antes de esta terrible crisis y que fue elegido y designado por otro gobierno", señalaba.

"Le he visto enlazar días y noches, trabajar hasta la extenuación, soportar estoicamente el desdén de los más ignorantes, las críticas más descabelladas; le he visto explicarse una y otra vez, responder a todo tipo de dudas y preguntas, reconocer con modestia los límites del conocimiento científico del que disponemos y admitir con humildad nuestra indefensión en estos momentos duros", manifestaba, al tiempo que defendía que "nunca se ha dejado arrastrar por la provocación, ni una sola vez".