Es la primera vez que habla ante los medios desde que salió a la luz que su pareja, en un correo a la Fiscalía a través de sus abogados, había reconocido dos delitos de fraude fiscal para intentar alcanzar un acuerdo. Pero, lejos de admitir cualquier ilegalidad, la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso ha insistido en denunciar las "gravísimas filtraciones" sobre su pareja y el ánimo del Gobierno de Sánchez de destruirla "por tierra, mar y aire".

"Esto entra dentro de la estrategia de defensa de un particular. No sé qué hace la inspección fiscal dando vueltas por los medios", ha señalado Ayuso. "Se usan las herramientas y poderes contra un particular. Es chavista y gravísimo. Es un escándalo absoluto teniendo en cuenta lo que se vive en España", ha seguido recordando la ley de amnistía "corrupta" y los "ministerios implicados". "Son ellos los que tienen que dar explicaciones", ha insistido sobre el Gobierno de Pedro Sánchez.

"Se están utilizando todas las herramientas y los poderes del Estado contra un particular para intentar hacer daño político a un adversario", algo que la presidenta de la Comunidad de Madrid considera "chavista y gravísimo".

En declaraciones a los medios de comunicación durante su visita a la fábrica de Finanzauto, ubicada en la localidad madrileña de Arganda del Rey, Ayuso defendió que ella responde por el Gobierno de la Comunidad de Madrid, que "nada tiene que ver con esta historia".

La líder del Ejecutivo madrileño reiteró que el Gobierno de Pedro Sánchez "no nos miente por años", sino que "ya nos miente de una semana para otra" y añadió que "se piensan que nos van a equiparar". Por último, la presidenta de la Comunidad de Madrid volvió a decir que "tenemos el futuro de España que se está negociando fuera de España y está en manos de un salvadoreño en Suiza".