El alcalde de la ciudad de Madrid, José Luis Martínez Almeida, ha querido condenar este miércoles los altercados que se llevan produciendo durante varios días frente a la sede del PSOE en Ferraz, donde se han dado enfrentamientos directos con la Policía, cánticos y soflamas fascistas y todo tipo de insultos contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y otros dirigentes del Ejecutivo y del partido. No obstante, y como han hecho a lo largo de las últimas horas otros líderes del PP, Almeida ha azuzado la cuestión catalana para alejarse de los hechos acontecidos en la casa socialista.
"Nosotros no somos de los que vamos a gritar 'apreteu', 'apreteu', como gritaba el presidente de la Generalitat. Porque todos recordamos cómo gritaba eso a los CDR y a Tsunami Democràtic", ha expresado el alcalde, que ha añadido: "Nosotros vamos a poner todos los medios para que esto no se produzca; para que no haya disturbios ni violencia en las calles de Madrid". De nuevo, ha insistido en no eximir completamente a Sánchez ni al Gobierno de España de la causa por la que se dieron esos disturbios en la capital en las últimas noches.
"Tampoco vamos a decir que esto está justificado porque hay una raíz política en este desencuentro y que para garantizar la convivencia hay que indultar a los delincuentes. No vamos a ir del 'apreteu' a la amnistía en la ciudad de Madrid", ha aseverado el alcalde, que ha afirmado que irán "a la condena y a la prevención de que se puedan producir de este tipo de comportamientos violentos". Unos comportamientos que, ha subrayado, en los que "no conviene incluir a la totalidad de personas que acudieron a la calle Ferraz" a manifestarse.
"Son una minoría, como también define la Policía Nacional. No conviene identificar que la mayoría de manifestantes estaban en este tipo de actitudes. Era una minoría contra la cual había que actuar", ha indicado el máximo responsable del Ayuntamiento de Madrid, que no ha dudado en aseverar que va a poner "todos los medios que nos requiera, también la Delegación del Gobierno, para reprimir las conductas violentas y que generen incidentes en la ciudad de Madrid". Almeida también ha aprovechado su intervención para restar importancia a los destrozos provocados por esos ultras. Según él, afectó apenas a tres contenedores y cinco cubos de basura, lo que supone un gasto de 2.000 euros.
Sus palabras son muy similares a las que expresaba unas horas antes el secretario general de los populares, Elías Bendodo. "El PP está en contra de cualquier tipo de violencia. Sea ante la sede de un partido político o en la calle. Igual que condenamos la que se produjo en otros tiempos y que ahora quiere amnistiar el PSOE. Nosotros no convocamos ni participamos en una manifestación que alcanzó una cumbre inaceptable. A Feijóo se le entiende perfectamente cuando habla y lidera un partido que está en contra de todo tipo de violencia", dijo el dirigente popular, en esa estrategia del PP que pone más énfasis en equiparar lo sucedido en Ferraz con lo que ocurrió en Cataluña que en denunciar per se esa violencia sistemática.