La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el presidente del grupo socialista, Jaume Collboni, han presentado el preacuerdo que han alcanzado para formar un Gobierno de coalición en Barcelona, que ha cosechado las críticas de todos los grupos de la oposición, y han pedido a las bases de Comú y del PSC que lo ratifiquen.

Ada Colau y Jaume Collboni han presentado la "Propuesta de acuerdo de gobierno de izquierda en Barcelona", que supondrá la incorporación del PSC, con cuatro concejales, al gobierno de Barcelona y permitirá que Jaume Collboni sea segundo teniente de alcalde de Empresa, Cultura e Innovación, un año después del inicio del mandato municipal.

La alcaldesa ha presentado el pacto como "bueno para la ciudad", mientras que, como era de prever, ha sido rechazado en bloque por la oposición, cuyos líderes no han dudado en calificarlo de "débil", "fracaso", "traición", "poco ético", "reparto de cargos", "desastre" o "estafa".

ERC ha pedido a las bases de BComú que no lo ratifiquen y la CUP se ha dirigido también a los militantes del PSC para pedirles que se "subleven para votar 'no'" a un pacto que vuelva a colocar a los socialistas en el gobierno local, que detentaron durante 32 años.

Para CiU el acuerdo es el resultado de un fracaso de BComú para sacar adelante la ciudad, y el PP cree que tan sólo se trata de un reparto de cargos, mientras que Ciutadans cree que ahora los barceloneses ya saben que votar a los socialistas "es votar a Podemos".