Elección del nuevo papa

El 'trumpismo' se moviliza ante el inicio del cónclave: "La Iglesia está en peligro"

¿Por qué es importante?
Tras la muerte del papa Francisco, el pasado 21 de abril, ya está todo preparado para la celebración del cónclave en el que 133 cardenales tendrán que elegir al nuevo pontífice. Raymond Burke, cardenal estadounidense y fiel seguidor de Trump, ha sonado como favorito mientras promulga que la Iglesia afronta "un momento de gran peligro".

El 'trumpismo' se moviliza ante el inicio del cónclave: "La Iglesia está en peligro"

16 días han pasado desde que el mundo conociera la muerte del papa Francisco. Era un lunes 21 de abril, a las 7:47 horas de la mañana, cuando se confirmaba el fallecimiento del pontífice a los 88 años y tras sufrir un ictus. "Queridísimos hermanos y hermanas, con profundo dolor, debo anunciar el fallecimiento de nuestro santo padre Francisco", anunciaba el cardenal camarlengo Kevin Joseph Farrell.

Ahora, con todo preparado para que se celebre el cónclave destinado a elegir al nuevo líder de la Iglesia católica, continúan las negociaciones, movimientos y los pactos de sillas entre los partidarios de un papa liberal, que siga la senda iniciada por Francisco, el papa de los pobres y del cambio, contra los que prefieren un papa más conservador, incluso un tanto extremista.

Entre los agentes que entran en juego, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y sus intereses. Porque el 'trumpismo' empezó a movilizarse nada más conocerse el fallecimiento de Jorge Mario Bergoglio y se activan, de nuevo, antes el inicio del cónclave: "La Iglesia está en peligro". Así se ha expresado este martes Raymond Burke, el cardenal estadounidense y acérrimo trumpista, no ha titubeado al decir en sus redes sociales que la Iglesia afronta "un momento de gran peligro".

Además, Burke, uno de los cardenales de la lista de los muy conservadores, ha aparecido en las últimas horas como uno de los favoritos para suceder al papa Francisco. A 20 horas del comienzo, su nombre parte con fuerza en un cónclave que arrancará este miércoles, a partir de las 16:30 horas, y en el que 133 religiosos tendrán que votar en busca de una fumata blanca.

¿Quién es Raymond Burke?

Estados Unidos tendrá a diez cardenales representados en el cónclave de este miércoles. Destacan dos nombres. El primero, el de Raymond Burke, considerado uno de los líderes en el ámbito más conservador. De hecho, hay que recordar que fue castigado por el propio papa Francisco, en el año 2023, sin residencia ni salario, y que es uno de los cardenales que ha defendido la construcción del muro de Trump en la frontera con México.

Junto a él, el arzobispo de Nueva York, Timothy Dolan. Un hombre que Donald Trump ha calificado como "muy bueno". "No sé, no tengo preferencia, pero debo decir que hay un cardenal de un lugar llamado Nueva York que es muy bueno. Veremos qué pasa", dijo hace unos días. Dolan ya estuvo presente en el cónclave de 2013, en el que fue elegido como nuevo papa el cardenal argentino Jorge Bergoglio. Allí, recibió dos votos y en este nuevo cónclave estará presente.

Otros de los cardenales estadounidenses a destacar es Robert Prevost, nombrado por Francisco prefecto del Dicasterio de los Obispos y presidente de la Comisión Pontificia para Latinoamérica y un fluido hispanohablante.

Donald Trump, autorretratado como nuevo papaDonald Trump, autorretratado como nuevo papaAgencia EFE

Y todo esto, sin olvidar las polémicas imágenes en las que Trump ha jugado a ser el papa gracias a la tecnología y a la inteligencia artificial. Preguntado por el malestar que han despertado las fotografías en el que se le ve vestido como si fuera el nuevo pontífice, Trump ha respondido: "Ah, ya veo. ¿Quieres decir que no aguantan una broma? No te refieres a los católicos, sino a los medios de comunicación falsos. A los católicos les encantó. Yo no tuve nada que ver. Alguien inventó una foto mía vestido de papa y la subió a internet. No fui yo. No tengo ni idea de dónde salió. Quizás fue IA. De hecho, a mi esposa le pareció adorable".

Solo unos días antes, llegó a afirmar que sería un gran papa: "Me gustaría. Sería mi opción número uno".