El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha conmutado la condena de su excolaborador Roger Stone, evitando así el ingreso en prisión del estratega republicano, previsto para el próximo martes.
Stone, de 67 años, fue condenado en febrero pasado a 40 meses de cárcel por mentir al Congreso, obstrucción y manipulación de testigos en el marco de la investigación sobre la llamada trama rusa.
"Roger Stone es una víctima del montaje de Rusia que la izquierda y sus aliados en los medios de comunicación perpetuaron durante años en un intento de socavar la Presidencia de Trump", dijo en un comunicado la portavoz de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany.
"Roger Stone -añadió- ya ha sufrido mucho. Fue tratado de forma muy injusta, como muchos otros en este caso. ¡Ahora es un hombre libre!".
A diferencia de un perdón presidencial, que exculparía a Stone de los delitos por los que fue condenado, la acción tomada por Trump de conmutar su sentencia tan solo le levanta el castigo de 40 meses de cárcel.
El comunicado mencionó que Stone afrontó "una acusación, arresto y juicio injustos" y que pese a la condena "mantiene su inocencia", por lo que merece, según la Casa Blanca, la oportunidad de defender de nuevo su caso en los tribunales.
"Stone, como cualquier estadounidense, merece un juicio justo y todas las oportunidades para defenderse ante los tribunales. El presidente no desea interferir en sus esfuerzos para hacerlo", explicó la portavoz.
El lema de Stone: "No admitas nada, niégalo todo y lanza un contraataque"
Además, la Casa Blanca citó los riesgos para la salud de Stone que supondría su ingreso en la cárcel debido a la pandemia del coronavirus.
Stone fue condenado después de semanas de luchas internas dentro del Departamento de Justicia, y de que el fiscal general de EE.UU., William Barr, emitiera una recomendación en la que instaba a rebajar la petición inicial de castigo.
Eso provocó que varios fiscales que llevaban el caso dimitieran y denunciaran presiones de altos cargos del Departamento de Justicia para que trataran a Stone de manera "diferente y más indulgente" durante su juicio debido a su relación con Trump.
Caracterizado por su estilo provocador, Stone es un veterano asesor político republicano entre cuyos clientes figuraron los expresidentes Ronald Reagan (1981-1989) y Richard Nixon (1969-1974) y cuyo lema favorito es: "No admitas nada, niégalo todo y lanza un contraataque".
Stone, que asesoró durante años a Trump y trabajó hasta agosto de 2015 en su campaña electoral, fue detenido por el FBI en enero de 2019 en Fort Lauderdale (Florida, EE.UU.).
Según la Fiscalía, Stone actuó como enlace entre la campaña de Trump en 2016 y la plataforma WikiLeaks, que difundió correos electrónicos robados al Comité Nacional Demócrata dañinos para la campaña de la candidata presidencial de ese partido, Hillary Clinton.
Stone fue condenado como parte de la investigación dirigida por el fiscal especial de la trama rusa, Robert Mueller, quien exoneró a Trump de haberse confabulado con Rusia durante el proceso electoral de 2016, pero que a su vez arrojó dudas sobre la posibilidad de que el presidente obstruyera la investigación.