El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el ministro israelí Benny Gantz, exministro de Defensa y líder de la oposición israelí que se unió al gabinete de guerra conformado por Netanyahu, han hablado este viernes en una conversación telefónica en la que han intentado rebajar la tensión diplomática entre ambos países aunque se han mantenido en sus respectivas posiciones sobre el conflicto entre Israel y Hamás.

Después de que el ministro de Exteriores de Israel, Eli Cohen, llamase a consultas el jueves a su embajadora en Madrid en protesta por unas declaraciones de Sánchez, el jefe del Ejecutivo ha coincidido con el presidente israelí, Issac Herzog, en la apertura de la cumbre climática COP28 de Dubai. Pero no ha habido ningún contacto entre ambos, según han informado fuentes de la delegación española, aunque han estado en la misma sala de la cumbre y en la foto de familia de los líderes asistentes al evento.

Sin embargo, sí ha habido esa conversación telefónica desde Dubai de Sánchez con Gantz después de que, según las mismas fuentes, fuera pedida por Israel casi de forma inmediata después de que se conociera la llamada a consultas de la embajadora en Madrid. En ella, Sánchez le ha reiterado a Gantz su condena a los ataques terroristas de Hamás y su exigencia de que sean liberados los rehenes israelíes. "Israel tiene derecho a defenderse de este ataque terrorista, pero he reafirmado que España considera insoportable la muerte de civiles en Gaza y que Israel debe cumplir con el Derecho Internacional Humanitario", ha explicado en las redes sociales.

Gantz también ha informado en sus redes sobre la conversación, donde ha explicado que "puso al día" a Sánchez sobre el conflicto y la necesidad de que Hamás sea desmantelado en Gaza. "Puse al día -ha escrito- sobre la guerra y los acontecimientos regionales y enfaticé que, por el bien de la seguridad de Israel y de los civiles israelíes y el restablecimiento de la estabilidad regional, el grupo terrorista Hamás debe ser desmantelado en Gaza".

El israelí ha asegurado que el Gobierno de Netanyahu concede gran importancia a evitar en la medida de lo posible víctimas civiles y que Hamás "continúa perpetrando horribles crímenes contra la humanidad, como utilizar a niños y mujeres como escudos humanos para sus actividades terroristas". Desde el Gobierno se ha informado de que se ha estado trabajando en esta conversación desde la noche del jueves y que ha sido constructiva, cordial y puede servir para reconducir la situación.

Además, aseguran que seguirán haciendo todo lo posible para lograr la normalización total y absoluta de las relaciones, aunque no hay ninguna previsión de que Sánchez hable próximamente con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.

Gantz, que se unió al gabinete de guerra conformado por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, tras estallar el conflicto con Hamás, ha sido también el encargado de mantener recientemente contactos con otros líderes internacionales con los que ha habido roces diplomáticos a causa del conflicto.

Así, fue el ministro que habló con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, tras un choque diplomático por las palabras de éste en las que solicitó a Israel la máxima moderación para minimizar el elevado número de víctimas en Gaza. También Gantz mantuvo el mes pasado una conversación telefónica con el presidente francés, Emmanuel Macron.