Seis de los muertos perdieron su vida en enfrentamientos en los alrededores del edificio de la Gobernación de la ciudad de Marsa Matruh, en el noroeste de Egipto. Según la agencia oficial Mena, el incidente, que causó además quince heridos de bala, comenzó cuando decenas de manifestantes en favor de Mursi atacaron a las fuerzas encargadas de custodiar la sede del gobernador, lo que motivó la respuesta de estos.
Mientras, en Minia, otras tres personas murieron y 14 resultaron heridas en el ataque de un grupo de fieles a Mursi sobre manifestantes que celebraban su derrocamiento en la llamada plaza Al Shuhada.
En esa misma ciudad se produjeron saqueos y destrozos, por parte de seguidores islamistas, de tiendas y establecimientos de opositores. Mientras, en Alejandría hubo un muerto y doce heridos en choques entre partidarios y detractores de la decisión militar, agregó Mena.
Cientos de simpatizantes de los Hermanos Musulmanes habían anunciado que iban a acampar en la zona de Sidi Bachar de la urbe, en la que se juntaron con egipcios que celebraban el derrocamiento.
Las fuerzas de seguridad lograron controlar finalmente la situación. En otras localidades como Al Fayum, al sur de El Cairo, no se registraron víctimas mortales, pero sí un gran número de heridos, al menos 70, según fuentes oficiales.
Fuerzas de la Policía y del Ejército, con blindados y gases lacrimógenos, lograron controlar airadas protestas de miembros del movimiento islamista en la ciudad de Sohag, capital de la provincia homónima.
Los simpatizantes de los Hermanos Musulmanes gritaban consignas contra el ministro de Defensa, Abdel Fatah el Sisi, que anunció la sustitución de Mursi por el presidente del Tribunal Constitucional Supremo, Adli Mansur, y la suspensión de la Constitución.