Medio siglo de tensiones

De la Marcha Verde a la eterna promesa incumplida del referéndum: las claves del conflicto en el Sáhara Occidental

El contexto La ONU ha dado el visto bueno al plan de autonomía de Marruecos en una decisión que han apoyado 11 países. Han desoído por completo al Frente Polisario.

Un ciudadano saharaui protesta por la decisión de la ONU
Escucha esta noticia
0:00/0:00

El Consejo de Seguridad de la ONU ha dado luz verde al plan de Marruecos para el Sáhara Occidental. Ha dado el visto bueno a ese plan marroquí para la que fuera colonia de España. Lo ha hecho con 11 votos a favor y con seis abstenciones. Con la abstención de, entre otros, Argelia. Del principal aliado del Frente Polisario. Lo ha hecho para dar el OK a que hasta 2026 esté vigente la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental.

Lo ha hecho, también, dejando de lado al Frente Polisario. Desoyendo a un pueblo saharaui que vive, o malvive, bajo el yugo de Marruecos. Que se ha visto obligado a exiliarse mientras que ven además cómo siguen decreciendo sus derechos. Que sigue sin tener libertad. Que ahora siente cómo la ONU les ha dejado a un lado y rechaza el proceso de autodeterminación. Todo, dicen, porque es "la solución más viable" para acabar con el conflicto.

Para poner fin a lo que lleva décadas sucediendo en el Sáhara Occidental. En una antigua colonia española. En un lugar que, bajo el nombre de Sáhara español, fue provincia de España hasta que la ONU pidió su descolonización en 1965.

Fecha en la que ya Marruecos tenía su mirada en la zona. En una que querían. En una que reclamaban como suya. En una en la que, además, surgió en 1973 el llamado Frente Polisario. Un movimiento independentista que pretendía la autodeterminación. Que quería ser libre. Que vio cómo cuando España se retiró en 1975 de la zona seguía sin haber un referéndum a pesar de los anuncios de dar una mayor autonomía al pueblo saharaui.

A pesar de prometer un referéndum de independencia que nunca se produjo. Y esto lo aprovechó Marruecos, que se anexionó el Sáhara Occidental animando a miles y miles de marroquíes a establecerse allí. Fueron cerca de 350.000 los ciudadanos que escucharon tal petición y que en 1975 cruzaron la frontera en la llamada Marcha Verde.

16 años de violencia

Fue entonces cuando el Frente Polisario libró una guerra de guerrillas contra Marruecos que duraría hasta 1991 y que tendría momentos clave como la proclamación de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), en 1976. Argelia, que se ha abstenido en la votación del Consejo de Seguridad de la ONU, fue su gran aliado.

Ante esto, en la década de los 80 Marruecos fue construyendo una serie de muros concéntricos en el desierto para contener al Frente Polisario fuera del territorio que estaba bajo su control. Tenían un 80% del terreno, con el RASD con apenas un 20 del que además casi todo era una desierto. Los marroquíes crearon una especie de fortaleza, con alambres de púas y con uno de los campos de minas más grandes de todo el planeta.

Y así fue durante 16 años. Durante más de tres lustros de lucha que tuvieron su final con la tregua negociada por la ONU en 1991. Con un acuerdo que puso fin, o que pretendía ponerlo, a la violencia entre Marruecos y el Frente Polisario.

Que decidió sobre esos casi 270.000 kilómetros cuadrados que a pesar de estar escasamente poblado cuenta con grandes reservas de fosfato y gran riqueza en cuanto a sus bancos de pesca. Que también decidió en lo que respectaba a la decisión del referéndum. Que prometió la realización de una votación para determinar qué quería el pueblo saharaui. Tres décadas después sigue sin celebrarse.

Tres décadas después el conflicto se ha reactivado, después de que en 2020 las tropas marroquíes cruzaran el paso fronterizo de Guerguerat, una zona desmilitarizada que separa Mauritania de las zonas bajo el control de Marruecos. El Frente Polisario consideró que Marruecos había roto el alto el fuego y declaró el estado de guerra en todo el territorio.

Miles de sarahauis, en el exilio

Así, hasta ahora. Hasta 2025. Hasta un año en el que miles de saharauis siguen en el exilio. En el que Amnistía Internacional recoge la cada vez mayor pérdida de derechos del pueblo del Sáhara Occidental. Porque señalan que los marroquíes no han cesado en su represión de la disidencia. En su persecución, enjuiciamiento y vigilancia a periodistas y activistas. Porque han ido a por las figuras críticas con el Gobierno. Porque se ha continuado con las penas de muerte.

Porque siguen sin respetarse la libertad sexual y los derechos de las mujeres y de las niñas. Porque ni tan siquiera se investigó lo sucedido en 2022 contra la población refugiada en una represión que acabó con 37 muertos y 77 desaparecidos. Porque es este el plan de Marruecos que ha aprobado la ONU con el visto bueno de, por ejemplo, Estados Unidos.

De un país que está tan feliz con que se haya dado luz verde a su propuesta. Mike Waltz, representante de EEUU en la ONU, ha defendido el texto aprobado y dice que es fruto de "un esfuerzo genuino y constante por incorporar las propuestas de todos".

En ese "todos", eso sí, no está el Frente Polisario. "El pleno reconocimiento del Consejo de Seguridad de la ONU de que el conflicto no se puede resolver sin el pueblo saharaui es una clara respuesta a los intentos de Marruecos, el Estado ocupante, que pretendía que se adoptase una resolución que resolviera el conflicto a favor de su posición expansionista", han compartido.

"Las posiciones unilaterales que pretenden sacrificar el estado de derecho, la justicia y la paz para una convivencia política a corto plazo tan solo van a agravar el conflicto y van a poner en peligro la paz", han recalcado en su comunicado.

Y añaden: "La resolución ni tiene en cuenta ni aborda de forma eficaz las cuestiones que plantan la mayoría de los miembros del Consejo de Seguridad y tampoco por el Frente Polisario".

En ese sentido, Sidi Mohamed Omar, representante del Frente Polisario en la ONU, ha reafirmado su posición en la sede de Naciones Unidas: "Que los ocupantes de Marruecos y quienes lo apoyan sepan que nuestro pueblo es grandioso y que no renunciará a su derecho inalienable a la libertad ni a la independencia".

*Sigue a laSexta en Google. Toda la actualidad y el mejor contenido aquí.