"Las dos partes mantienen la voluntad de que se celebre la reunión de ministros", declaró un portavoz del Ministerio de Unificación surcoreano, que sugirió así que las negociaciones van por buen camino aunque de momento no desveló detalles sobre los avances logrados.
El portavoz explicó que los representantes de Norte y Sur han debatido de momento el protocolo, la ubicación, el orden del día y el tamaño de las delegaciones que estarán en el próximo encuentro ministerial, que previsiblemente tendrá lugar el miércoles en Seúl.
Todos los detalles sobre este próximo encuentro se cerrarán esta tarde, durante la segunda y última sesión de la reunión preliminar de hoy, según el portavoz de Unificación.
De celebrarse finalmente, la cita será histórica, ya que el último encuentro a ese nivel entre Norte y Sur data de 2007 y en los últimos años las relaciones entre ambos vecinos han estado marcadas por la tensión y los constantes desencuentros.
Entre los asuntos que se abordarán el miércoles, el más urgente es el relativo al complejo de Kaesong, un macroproyecto industrial con capital surcoreano y mano de obra del Norte que permanece cerrado desde que en abril Pyongyang retirara a sus 53.000 trabajadores en plena campaña de hostilidades hacia Seúl.
Además, Norte y Sur previsiblemente buscarán la reapertura del enclave turístico conjunto del Monte Kumgang, clausurado desde 2008, y el reinicio de los encuentros de familias separadas por la Guerra de Corea (1950-53), que no se producen desde finales de 2010.