El frío es todavía más gélido para quienes menos tienen. Nos lo cuentan en primera persona Moha y Yassir, dos personas que viven sobre un colchón en Madrid desde hace siete meses. Ella está embarazada y han pedido ayudas sin recibir respuesta alguna.

"Por la noche no puedes dormir, pasas mucho frío", confiesa Yassir. También visitamos una capilla madrileña que se ha convertido en un albergue improvisado para 20 personas sin hogar. Entre ellos está Carlos y su familia, que emigraron hace un mes desde Colombia.

"Si no estuviera este recurso, mis hijos y yo estaríamos en la calle pasando frío", asegura. En pueblos como Molina de Aragón, sus vecinos ya están sumamente acostumbrados a combatir temperaturas de -16 ºC: con mantas, gastando el doble en calefacción y ciertas precauciones.