El episodio excepcional de calor que llevamos sufriendo toda la semana ha dejado un "estrés término impresionante" durante esta madrugada, tal y como ha afirmado Francisco Cacho, meteorólogo de laSexta, quien ha señalado que hemos vuelto a tener una "noche tórrida, con temperaturas por encima de los 25 grados en algunas capitales de provincia como Huesca (mínimas de 27) o Barcelona (mínimas de 26). Además, en Madrid se han llegado a los 29 grados, en Valencia a los 26 y en Jaén a los 32.
Sin embargo, lejos de aminorar esta situación, lo cierto es que, según ha advertido Cacho, este viernes es el peor día de la ola de calor, especialmente en el norte. Y es que allí, "donde hasta ahora se habían librado del calor", también habrá ascenso de temperaturas, como en Bilbao, donde se alcanzarán los 39 grados. Precisamente, allí el Ayuntamiento ha instalado fuentes provisionales para hacer frente a las altas temperaturas.
Mientras, las temperaturas más altas de este viernes se esperan en Córdoba, con 43 grados. Además, en Madrid se podrán alcanzar los 40 grados, mientras que en la Comunidad Valenciana rondarán los 35 grados. De esta forma, el calor se extiende por más puntos de España, hasta el punto de que hay avisos en 15 de las 17 Comunidades Autónomas por altas temperaturas. Solo se libran Galicia y Canarias. Esto supone que más de 33 millones de personas están afectadas por el calor intenso.
Previsión para el fin de semana
La previsión para este fin de semana es que se produzca un descenso de las temperaturas en el oeste de la Península. En algunos puntos se podría bajar hasta diez grados, como en Zamora o Badajoz. Sin embargo, el calor se recrudece en el este de España, de forma que en Zaragoza se podrán llegar hasta los 43 grados y en Bilbao hasta los 40.
En este sentido, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha activado los niveles rojos por calor para este sábado en Navarra, La Rioja y Zaragoza.
Además, otros países cercanos a España también están sufriendo una ola de calor, como es el caso de Francia. En París, ya han alcanzado los 35 grados, unas temperaturas inusuales para la capital francesa, y se estima que podrían llegar a los 40 grados en algunos puntos de Francia.