"En algunos casos, los vecinos se han visto sobrevenidos en su comunidad por un fenómeno que altera la convivencia, que daña sus horas de descanso, y mi planteamiento es que hemos de empoderar a los vecinos para que puedan condicionar o vetar su llegada o, en su caso, autorizarla". Son las palabras que utilizaba la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, hace unas semanas en referencia a una posible reforma en la Ley de Propiedad Horizontal con el fin de limitar la proliferación de pisos turísticos que castiga algunas zonas de España.
Será durante la mañana de este miércoles, que el PSOE -formación a la que pertenece la titular de la cartera- presente una enmienda para modificar lo que dice la citada ley sobre los poderes de los vecinos de una comunidad para decidir si permitir la instalación de un alojamiento turístico. No obstante, la enmienda se presenta a la Ley de Servicio Publico de Justicia que se va a aprobar en breve y que afectará a la de Propiedad Horizontal.
Esta norma establecía que si un alojamiento destino al turismo molestaba a la comunidad vecinal, sus miembros podían quejarse y poder eliminarlo con el apoyo de tres quintas partes. Con la modificación, en cambio, todo el que quiera implantar una vivienda de este tipo tendrá que contar de forma previa con la autorización de los vecinos. Esta es la forma a la que Rodríguez se comprometía para "empoderar" a los vecinos.
El anuncio, que ha podido confirmar laSexta, llega después de que este martes la ministra se reuniera con el presidente de la Confederación Nacional de Agentes y Empresas Inmobiliarias (CNAEI), Gerard Duelo. En el encuentro, ambas partes analizaron la situación del acceso a la vivienda en España, así como la posibilidad de colaborar en el desarrollo del futuro Plan Estatal de Vivienda, tal y como recogió el Ministerio en una nota de prensa.
Votos en contra de PSOE y Sumar
Junts se alía con el PP para fulminar un impuesto eléctrico tras la amenaza de Puigdemont a Sánchez
Entre líneas Solo un día después exigir una cuestión de confianza a Sánchez, el partido de Puigdemont escenifica un acercamiento con los de Feijóo. Una maniobra de Junts para reclamar el foco perdido y es que, horas antes de conocerse esta alianza, Turull ha asegurado que no se fía del líder popular.