Pagar más impuestos. Es la petición, a primera vista insólita, que lanzan más de 200 millonarios a los líderes políticos que estos días se reúnen en el Foro de Davos. "Vosotros, nuestros representantes globales, tenéis que gravarnos a nosotros, los 'ultrarricos', y tenéis que empezar ahora", instan en una carta abierta.

Entre sus firmantes -que puedes conocer aquí- se encuentra el actor estadounidense Mark Ruffalo, pero también otras caras conocidas, como la de John Carpenter, ganador de 'Quién quiere ser millonario', y también miembros de la familia Disney, herederos de grandes compañías, como Marlene Engelhorn, de la farmacéutica BASF, o emprendedores de grandes cadenas de pan, como Ian Gregg.

En total, son más de 200 los 'ultrarricos' firmantes de esta carta dirigida a los líderes mundiales. En esa misiva, aseguran que se trata de "economía de sentido común" y "una inversión por nuestro bien común y por un futuro mejor". "Como millonarios, queremos hacer esa inversión", aseguran.

Pero, si los ricos están pidiendo pagar más, ¿por qué los gobiernos no les suben los impuestos? El inspector de Hacienda José María Peláez explica a laSexta que "los sistemas tributarios realmente no gravan la riqueza" sino, "sobre todo, la renta". El experto pone el ejemplo de una hipotética herencia multimillonaria: "Lo tiene en fondos de inversión o lo tiene en el extranjero y no paga impuestos", ilustra.

Además, no todos los ricos tienen esta visión tan solidaria. Por ejemplo, el multimillonario heredero Eric Schoenberg, uno de los firmantes de la carta, critica que, en un futuro, los hijos de Jeff Bezos, fundador de Amazon, vayan a poder heredar "50.000 millones de dólares libres de impuestos".

Más allá de la filantropía, estos 'ultrarricos' lo que piden es simplemente que el sistema, en un momento que tiende a la desigualdad, no se rompa. Morris Peral, fundador de 'Multimillonarios patrióticos', lo resume así: "Aquellos que somos ricos nos estamos haciendo más ricos, pero tantos americanos simplemente no lo están haciendo y se están quedando atrás". En un mundo -dicen- en el que todos, pero ellos más, porque pueden, debemos contribuir.