Ford renuncia a acceder al proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica (Perte) del vehículo eléctrico y conectado (VEC), en el que se le habían asignado 106 millones, pero asegura que mantiene su compromiso con la planta valenciana de Almussafes.

En un comunicado al que ha tenido acceso EFE, la multinacional señala que las previsiones de producción para Europa introducen un retraso en sus planes de producción para España, lo que significa que no pueden aprovechar el programa de financiación Perte.

No obstante, Ford muestra su voluntad de reforzar el compromiso con la planta valenciana, pues las operaciones de la compañía en España siguen siendo una parte fundamental de su estrategia para Europa. Además, agradece al Gobierno su cooperación y espera trabajar en colaboración con el Ejecutivo central y la Generalitat Valenciana para buscar oportunidades de financiación adicionales a medida que se avance hacia una gama de vehículos de pasajeros totalmente eléctricos para 2030.

La Generalitat aduce un retraso

La decisión de Ford supone "un cambio en sus plazos, no en sus planes". Así lo han asegurado fuentes de Presidencia de la Generalitat, que insisten en que "Ford confía en Valencia mas allá del Perte". Se trata, dicen, de una reprogramación de las inversiones que hace imposible que pueda acceder al citado proyecto estratégico.

Según Presidencia, la compañía mantiene todos sus compromisos de futuro con la planta de Almussafes y tanto la Generalitat como el Gobierno de España mantienen todo el apoyo para esa transformación.