Ni la ausencia de público por el coronavirus evitó el espectáculo de una de las noches más esperadas de Estados Unidos. WrestleMania 36 no solo no se canceló, sino que dejó una ración de grandes combates y una pelea sin duda para el recuerdo. Fue la de Undertaker, el mítico e incombustible Undertaker, contra AJ Styles, con un final apoteósico que ya está en la historia de la WWE.

Ambos se tenían ganas, con una rivalidad que ya venía de lejos. Fue en el evento SuperShowdown cuando ambos se 'conocieron', y ha sido en este Wrestlemania, sin público y disputado en dos noches, cuando Undertaker ha dictado sentencia. Cuando 'The American Baddas' fue el verdugo de AJ Styles en el Boneyard Match.

Fue el principal evento de la noche, y se peleó bajo una estética cinematográfica... en un cementerio como escenario. Quien antes enterrase al otro ganaba, y lo cierto es que ahí Undertaker parecía estar más en su terreno. Más aún cuando recuperó a su mítico personaje 'The American Badass'.

AJ Styles trató de reírse de su oponente. De ridiculizarle. Primero, al salir de un ataúd en un coche fúnebre para el combate. Y luego, además, porque usó la música de entrada de Undertaker. Ahí fue cuando la leyenda de la WWE apareció con su moto para el combate.

Lo cierto es que Undertaker tenía el combate bajo control, pero Anderson y Gallows estuvieron a punto de acabar con él. Ambos aparecieron para ayudar a AJ Styles y para meterle en la tumba, pero cuando todo parecía decidido llegó el gran momento.

De la nada, Undertaker apareció tras Styles en un tractor y le metió en la arena. En la lápida, el nombre de Styles y un espectáculo que hizo que por un rato todos se olvidasen de que no había absolutamente nadie en las gradas del evento WrestleMania 36.