'Drive to survive', las redes sociales, el aumento de actos publicitarios de los equipos... en los últimos años, el producto de la Fórmula 1 ha evolucionado con la intención de acercar el deporte al aficionado.

Este aspecto lo ha analizado Juan Pablo Montoya en el podcast oficial de la F1, 'Beyond The Grid', ofreciendo un llamativo punto de vista sobre la realidad pasada y actual de la categoría.

El colombiano ha recordado los días que compartió con Ralf Schumacher en sus cuatro años en Williams: "Ralf era muy rápido, Dios mío. Jugó conmigo mucho tiempo, me enfadaba mucho, las cosas que podía hacer con el coche a una vuelta, eran irreales. Fue un poco frustrante no estar a su nivel al principio. Al final, lo acabé destrozando mentalmente. Nunca llegamos a hablar".

En sus días como piloto tan solo mantenía buena relación con Fernando Alonso y, en ocasiones, con Felipe Massa y Rubens Barrichello.

"Ahora, con las sedes sociales y todo, los compañeros de equipo son los mejores amigos, van a cenar juntos, a jugar a pádel juntos. En mis tiempos, no hablabas con nadie, solía hablar con Fernando y lo sigo haciendo, con Rubens y Massa, a veces. Era un entorno más hostil y recuerdo una de las mejores frases de Ganassi, si quieres amigos, tráelos, no estás aquí para hacer amigos, y es verdad", ha explicado Montoya.

Según él, compartir tanto tiempo con tus rivales fuera de pista puede afectar a tu rendimiento en la misma: "Con las redes sociales, todos hablan y son agradables. Eso sí, cuando eres tan agradable, es más duro ser un gilipollas y también es más duro echar fuera de la pista a un piloto que sabes que te cae bien. Si un piloto con el que has cenado ayer, es más difícil meterle el coche, sí que lucharás duro, pero no eres tan despiadado. Ahora, las reglas te permiten ser más extremo, en mis tiempos sólo podías pilotar en un puñetero circuito".