Carlos Sainz ha mostrado su versión más autocrítica después de su actuación en el Gran Premio de Australia. El piloto español ni siquiera pudo terminar la carrera, mientras que su compañero en Ferrari, Charles Leclerc, cruzó la línea de meta como primero en el circuito de Albert Park.

Sainz reconoció en rueda de prensa que no fue un buen fin de semana para él: "Es difícil responder si éste fue mi peor fin de semana en Fórmula 1 porque no recuerdo con exactitud mis otras 100 carreras en Fórmula 1. Es complicado saber si éste fue el peor, pero era definitivamente un fin de semana en el que parecía que todo iba bien".

"Parecía que me sentía mucho más cómodo con el coche y estaba juntando vueltas sólidas a lo largo del fin de semana. Pero luego se volvió probablemente uno de mis fines de semana más decepcionantes en Fórmula 1", añadió.

No obstante, el piloto español confía en revertir la situación y ya tiene la mirada puesta en el Gran Premio de Emilia Romagna y todas las pruebas siguientes: "Lo importante es que aprendí de ello y que también aprendimos de ello como equipo. A ser más perfectos, a ser más sólidos, más fuertes en todos los aspectos y teniendo en cuenta eso, quedan 20 carreras en las que todo puede pasar".

"Solo podemos usar este fin de semana como recordatorio para asegurarnos de que aprendemos de ello y de que las 20 carreras que nos quedan son más perfectas", concluyó el de Ferrari.