El Milan, que pasó a un consorcio de inversores chinos, salvó un punto en el derbi milanés ante el Inter gracias a un gol en el último segundo del colombiano Cristian Zapata, que determinó el 2-2 final. El Inter, que había sufrido mucho al principio del encuentro, se hizo con una ventaja 2-0, gracias a los goles de Antonio Candreva y del argentino Mauro Icardi, pero el Milan logró recortar distancias en el 83 con Alessio Romagnoli y empatar en el 96 por medio de Zapata.
En un derbi que fue definido 'chino', ya que ambos equipos pertenecen a inversores del país asiático, el español del Milan Gerard Deulofeu se lució con una gran actuación y sólo le faltó el gol, que le fue negado por el poste y por unas importantes intervenciones del portero rival.
El Milan empezó el derbi con gran agresividad y rozó el gol en tres ocasiones en los primeros 15 minutos de juego, liderado por la velocidad de Deulofeu y de Suso en las dos bandas. Los "rossoneri" tuvieron una doble ocasión nada más empezar el partido: el portero del Inter, el esloveno Samir Handanovic, realizó una gran intervención tras un intento de Deulofeu y Bacca desaprovechó otra oportunidad rematando alto el rechace.
Los errores del Milan terminaron siendo castigados por el Inter, que aprovechó sus primeras dos ocasiones del encuentro para marcar dos goles e irse al descanso por delante 2-0. Candreva firmó el primer tanto tras recibir un pase al hueco de Roberto Gagliardini mientras que Icardi amplió distancias al borde del descanso rematando un centro del croata Ivan Perisic.
El Milan, que había dominado el duelo, tardó unos minutos para reaccionar pero, tras otra gran parada de Handanovic ante Deulofeu, logró recortar distancias merced a Romagnoli, que empujó entre las mallas una gran asistencia de Suso (m.83).
Los 'rossoneri' terminaron el partido con hasta cinco jugadores ofensivos, con el argentino Lucas Ocampos y Gianluca Lapadula que se sumaron al tridente, y lograron el 2-2 en el último instante. En una acción originada en un saque de esquina, Cristian Zapata logró empatar con un disparo que superó la línea de gol por pocos centímetros tras impactar en el larguero. El Inter protestó por la decisión pero la Tecnología de Línea de Gol (GLT) demostró que el balón había entrado completamente.