Rubiales tiene un cerco policial que comenzó hace dos años, cuando arrancó la investigación sobre presuntas irregularidades en contratos de la Federación de Fútbol. El expresidente de la RFEF, en cambio, siempre ha defendido que nunca ha cobrado comisiones.

La UCO recaba documentación de los últimos cinco años ubicada en al menos tres ciudades. La primera es Las Rozas, en Madrid, donde se encuentra la sede de la Federación y actualmente entrena la Selección Española de Fútbol, cuyos jugadores afirman no tener conocimiento de la causa.

Otra de las ubicaciones donde están teniendo lugar registros es en Granada, concretamente en la casa de Rubiales y en un hotel relacionado con él. Los agentes investigan su mandato como presidente, principalmente el millonario contrato de 40 millones anuales para que la Supercopa de España se celebre en Arabia Saudí que él siempre ha defendido.

Pero habría más casos sospechosos que salen del tercer registro, en Sevilla, en concreto en el Ayuntamiento y en el Estadio de La Cartuja, que tiene a la Junta de Andalucía como propietario principal. La Federación de Rubiales firmó que se jugaran en Sevilla una serie de finales de la Copa del Rey, y también se pactó una remodelación del estadio, de cara al Mundial de 2030.

La suma de todo lleva a la jueza a investigar tres delitos: dos son corrupción y administración desleal, por si se ha podido favorecer a amigos, como por ejemplo a la empresa del futbolista Gerard Piqué con la Supercopa. También se investiga un tercer delito de blanqueo de capitales por si Rubiales o su entorno, en España o el Extranjero, están lavando comisiones.