El Villarreal se ha conformado con el empate (0-0) en su visita al Deportivo en el estadio de Riazor y se ha alejado de las posiciones de Liga de Campeones después de la victoria del Atlético de Madrid ante el Betis en el Vicente Calderón.
Los castellonenses acusaron las ausencias, plantearon un partido táctico, apenas inquietaron a su rival y gracias al poste y una gran intervención de Sergio Asenjo en la segunda mitad consiguieron su objetivo ante un Deportivo al que el punto le sirve para seguir avanzando hacia la permanencia.
Después de haber sido eliminados de la Copa del Rey, Gaizka Garitano y Fran Escribá refrescaron a sus equipos, diezmados por las bajas, con cinco cambios en sus respectivas alineaciones.
En el césped, el conjunto coruñés administró el balón y el castellonense cerró filas y contuvo, no sin dificultad, a los locales, que dispusieron de un disparo con la zurda del costarricense Celso Borges a los cuatro minutos y varios saques de esquina ejecutados por el turco Emre Çolak para adelantarse en el marcador en el primer cuarto de hora.
Por los pies del centrocampista otomano pasó casi todo el juego ofensivo de los blanquiazules, aunque también puso de su parte el colombiano Marlos Moreno, voluntarioso desde la banda derecha pero, una vez más, sin demasiada fortuna en la resolución de las jugadas.
Más peligro llevó el rumano Florin Andone, mejor jugador de LaLiga Santander en diciembre, que, tras recibir una asistencia de Çolak, obligó a Asenjo a desplegar los puños para despejar a córner.
El Villarreal, con las líneas juntas, dejaba hacer al Deportivo, sin bajar la guardia, preparado para estirarse en un abrir y cerrar de ojos, con esa sensación de amenaza latente que transmiten los equipos grandes.
El polaco Tyton salvó la más clara que tuvieron los de Fran Escribá en el primer periodo, un disparo desde la frontal de Bruno Soriano (min.27).
Los visitantes quisieron tener más el balón en el segundo periodo, menos táctico que el primero, pero las oportunidades empezaron siendo para los locales. Los blanquiazules pidieron penalti por agarrón de José Ángel a Arribas a los 50 minutos y rozaron el gol con una chilena de Andone al poste a falta de media hora.
El Villarreal se dio cuenta en esa acción que el partido podía írsele, avanzó metros y cambió el guion, pero sin caer en excesos ofensivos. De un pase de José Ángel desde la izquierda que dejó pasar con calidad Samu Castillejo surgió la opción más seria de los castellonenses, un disparo de Manu Trigueros que se marchó por encima de la portería del Deportivo a los 71 minutos.
El Villarreal estuvo a punto de pagar su falta de ambición, pero su portero, Sergio Asenjo, voló a falta de seis minutos para desviar un remate de cabeza del recién entrado Joselu Mato y los dos equipos se repartieron los puntos.