'La forma de ganar'. Esa frase que ha perseguido a muchos. Ese 'lema' que muchos han dicho, que han repetido como un eslogan publicitario. Que el Barça ha mantenido durante tiempo. Durante bastante tiempo... pero que cada vez es más flexible. Y les está yendo bien, porque vencer están venciendo... al menos en LaLiga.

Muestra de esa flexibilidad están siendo estos últimos encuentros que los culés están jugando en el torneo de la regularidad. Y, en especial, este último ante el Girona. Uno en el que hubo un detalle, o más bien dos detalles, que dejan claro que la forma de ganar cuenta pero que la clave, al final, es ganar.

Error del Girona en la salida de balón... y gol

Le costó mucho al Barça encontrar la fluidez en ataque cuando Dembélé se lesionó en el minuto 21. Sin él, y con Pedri, el líder se atascó. Se atascó mucho ante el Girona. Ante un equipo que dio lo mejor de sí mismo en cuanto a presión e intensidad, y que tan solo un error en la salida de balón le hizo caer.

La acción, que empezó en la derecha del ataque culé, acabó en la izquierda. Fue por una presión arriba y una mala salida de balón. De banda a banda, Jordi Alba la puso en el área y Pedri empujó a la red tras un error claro de Gazzaniga.

Cero a uno, y el Girona apretando. El Barça perdió el control y la posesión. Los locales, cada vez más cerca del empate. Ahí apareció Xavi Hernández, que hizo un par de cambios que de haber sido otro, como por ejemplo Simeone, se habría dicho lo que siempre se dice.

Dos cambios, una idea clara

Ansu Fati y Raphinha, delanteros, dejaron el campo. En su lugar, Balde y Kessie. Un lateral izquierdo para poner dos y frenar a Arnau y sus peligrosas acometidas por la derecha, y un mediocentro de gran capacidad física.

Todo en los últimos diez minutos para cortar el arreón del Girona y para aguantar el 0-1 como pudiesen. Lo hicieron, pero los de Míchel, que terminó expulsado, tenían al Barça acorralado en su campo. Prácticamente no podían salir del área.

Pero los tres puntos se fueron a la Ciudad Condal, y los de Xavi presionan a un Real Madrid que a falta de jugar su partido en la presente jornada están a seis de los culés.