La holandesa Sifan Hassan, campeona de Europa de 1.500 en 2014, se proclamó campeona de 5.000 metros con un tiempo de 14:46.12s.
Sin embargo, la imagen de la carrera la protagonizó la israelí Lonah Salpeter, que se había escapado con ella, se paró en el penúltimo paso por meta, pensando que había terminado y terminó perdiendo incluso el bronce.
Hassan se puso delante a dos vueltas del final y llegó a la meta con 21 segundos de ventaja sobre la segunda, la británica Eilish McCongan, que había tirado del grupo durante los dos primeros kilómetros.
La turca Yasemin Can, defensora del título, subió al podio como tercera con un crono de 14:57.63, arrebatando el bronce a Salpeter, que el miércoles había conseguido la victoria en el 10.000.
Cuando corría en segunda posición al paso por 4.600, Salpeter pensó que la prueba ya había terminado. La israelí no escuchó la campana que anunciaba la última vuelta y creyó haber finalizado la carrera, por lo que se puso a celebrar el metal.
Cuando se dio cuenta de su tremendo error, ya le habían adelantado y, finalmente, culminó la prueba en cuarta posición. Salpeter acabó entre lágrimas y hasta el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, la consoló en redes sociales: "¡Eres una verdadera estrella! Has traído un gran honor a nuestro país".
לונה צ'מטאי את תותחית אמיתית! הבאת כבוד גדול למדינה שלנו 🇮🇱 pic.twitter.com/FTr5aAV3iy
— Benjamin Netanyahu (@netanyahu) 12 de agosto de 2018