Hecho trizas, Daesh ha
hecho muy bien su trabajo para destruir todo símbolo cultural que ha encontrado
a su paso y ha arrasado por completo el museo de Mosul. Los soldados del Ejército
Iraquí se lo han encontrado destrozado después de recuperarlo del grupo terrorista.
Hacía dos años que no
veíamos su interior, entonces Daesh difundió unas imágenes en las que destruye
impunemente estatuas del siglo IX antes de cristo. Por suerte, algunas, las
que se rompían más fácilmente, eran réplicas de escayola y las auténticas
habían sido trasladadas previamente a Bagdad. Las piezas de mayor tamaño no
corrieron la misma suerte.
Mientras tanto, arqueólogos iraquíes trabajan en esta misma ciudad bajo tierra y contrarreloj recuperando obras de arte que Daesh escondía en túneles, antes de venderlas en el mercado negro. Mosul está lleno de ellos y corren peligro de derrumbe. Lo último que han recuperado, son dos grandes toros alados del Imperio Asirio que datan del siglo VIII antes de cristo.