Hewlett-Packard, una de las mayores empresas de tecnologías de la información del mundo, ha ordenado la retirada de más de 50.000 baterías integradas en varios de sus modelos de ordenadores portátiles. La razón: han descubierto que existe un riesgo de sobrecalentamiento en estos aparatos que podría provocar incendios e incluso explosiones.

La empresa señala en su comunicado que los ordenadores afectados pertenecen a la gama de modelos vendida en los últimos dos años, y deben ser devueltos de forma urgente para reducir el peligro que supone la circulación y utilización de estas nuevas baterías. En cualquier caso, la compañía también ha explicado en su escrito que procederá a actualizar la BIOS de los modelos en riesgo para que las baterías de los mismos se descarguen y queden inutilizados

De esta forma, solo podrán ser usados cuando estén conectados directamente a la corriente eléctrica mientras el servicio técnico de HP se encarga de cambiar la batería. Los modelos afectados son los HP Probook 64x (G2 y G3), HP ProBook 65x (G2 y G3), HP x360 310 G2, HP ENVY m6, HP Pavilion x360, HP 11 Notebook y los HP ZBook (17 G3, 17 G4 y Studio G3).

Uno de los problemas que ha presentado este informe es que, en algunos de los modelos, las baterías están integradas directamente en el portátil, por lo que sus propietarios deberán enviarlos a la empresa y se quedaran sin ellos el tiempo que dure la reparación.

No es la primera vez que Hewlett-Packard sufre una crisis de este tipo. Tanto en 2016 como en 2017 se vio obligada a retirar varios de los últimos modelos lanzados al mercado por una situación similar: el fallo en sus baterías que podía derivar hasta en una explosión dentro del ordenador.