El Congreso de los Diputados ya ha votado, por segunda vez esta semana, la investidura de Alberto Núñez Feijóo. El candidato necesitaba una mayoría simple para ser investido: más síes que noes. Pero no lo ha conseguido: 172 diputados han manifestado su apoyo, 177 han dicho que no a su candidatura y ninguno se ha abstenido. De esta forma, la Cámara Baja ha rechazado la confianza que solicitaba el martes el líder popular. Así, el mes de negociaciones que solicitó a la presidencia del Congreso para recabar votos no ha dado sus frutos y ahora vuelve a ser el turno del rey Felipe VI.

El Palacio de Zarzuela volverá a acoger una nueva ronda de consultas. El rey recibirá a los representantes de los principales partidos para designar un nuevo candidato a la investidura. El segundo candidato más votado, Pedro Sánchez, espera que sea él el designado. Su objetivo, como ha repetido en varias ocasiones, es dedicarse "en cuerpo y alma" a renovar mandato hablando "con total franqueza y transparencia sobre cuáles van a ser las líneas maestras" de su Gobierno. Sánchez, hasta ahora, ha evitado pronunciarse sobre las exigencias del independentismo, pues quería hacerlo una vez terminase el debate de investidura del gallego.

Lo único que ha adelantado al respecto es que será coherente con lo hecho hasta ahora en materia de normalización y estabilización de la situación política en Cataluña, citando la Constitución: "El objetivo de mi Gobierno para los próximos cuatro años es el progreso y la convivencia. El método será el diálogo con los actores sociales en lo que tenga que ver con el progreso y con los actores territoriales todo lo que tenga que ver con la convivencia, y el marco es la Constitución".

Pero sí que se ha pronunciado la unilateralidad. Desde Nueva York instó la semana pasada a que los partidos políticos fuesen responsables y apostasen por la unilateralidad en Cataluña cuando el 90 % de sus ciudadanos no la apoyan. "Si queremos apelar a una mayoría para trascender y pasar página, lo que tenemos que hacer es mirar a ese 90 %", insistió.

Cuándo será el debate de investidura de Sánchez

En cualquier caso, Sánchez ha expresado su voluntad de tener el tiempo suficiente para pactar con las formaciones. En cualquier caso, una vez el Rey le comunique a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, la candidatura de Sánchez, será ella la que fije fecha para la investidura atendiendo a las peticiones del candidato y al estado de sus pactos. La media de tiempo que transcurre entre el mandato del rey y la celebración del pleno de investidura es de aproximadamente un mes.

En el caso de Feijóo, han sido de 35 días. Si Sánchez solicita contar con el mismo tiempo, su debate de investidura se celebraría en torno a finales de octubre o principios de noviembre. Sin embargo, sería a finales de noviembre cuando terminaría el plazo para lograr investir a algún candidato, pues se fijan dos meses desde que se celebra la primera votación. Es decir, si el 27 de noviembre no hay presidente del Gobierno, se convocarán elecciones generales el 14 de enero de 2024.