Frente a la vorágine consumista llega la vergüenza sueca. 'Köpskam' es un término que empezó a definir este comportamiento culpable que se experimenta cuando se compran productos innecesarios, en especial procedentes de la industria textil, y que alimentan armarios que ya están llenos. El nombre de 'köpskam' se interpone entre el producto y el consumidor como "la vergüenza de comprar", una proclama que llama a la responsabilidad frente al coste medioambiental y humano del consumismo.

Un día tranquilo empiezas a ver por internet ropa, comida o artículos que sin ser muy necesarios pican tu atención por un momento. En ese instante, te entra el 'gusanillo' y de forma liviana le das al botón de 'Introducir el artículo en el carrito', un acto que se convierte de forma inevitable en un 'Comprar'. Minutos más tarde la dopamina que generaba la compra se ha esfumado completamente y comienza el momento de sentirse culpable. Ahí te das cuenta: has comprado algo que no necesitabas.

Este sentimiento tiene nombre y se denomina 'köpskam'; una palabra sueca que hace referencia a la sensación de culpabilidad que deja la compra compulsiva de productos de los que ya se tiene de sobra. Esos productos suelen ser textiles: ropa, artículos de vestir; aunque el significado de este término ya se ha extendido por todo el mercado en contacto con el consumidor, según indica el diario 'El País'. El fenómeno nació con la democratización de la industria de la moda y su influencia llama a la responsabilidad medioambiental en todo el mundo.

Debido a un aumento de la información sobre la industria textil y de la concienciación medioambiental de la gente, han empezado a rechazarse los conceptos de 'usar y tirar' que dejó la industria de consumo para introducir nuevos como el 'köpskam', que apelan a la responsabilidad con el planeta y los procesos sostenibles. Según la Organización de Consumidores y Usuarios, "la industria de la moda es la responsable del 10% de las emisiones de CO2 mundiales, más que los vuelos y el transporte marítimo" y ya son muchas las empresas que han empezado a crear modelos de negocio sostenibles como Vinted, Wallapop, Percentil o Upcyclick.

El 'No spend challenge' o el 'reto de no gastar' en TikTok

El término sueco 'köpskam' ha tenido mucho impacto en las redes sociales y se ha convertido en una tendencia en TikTok y otras redes sociales como Instagram. El objetivo de los 'influencers' que se suman a estos 'trends' es ser más responsables con su dinero y con el entorno que les rodea porque entienden que tener un estilo de vida más sano a nivel financiero también repercute en la mejora del planeta.

Para ello, en muchos de sus vídeos se dejan ver calendarios titulados como 'No spend month' ('mes de no gastar'), intentando reducir al máximo su nivel de compras y caprichos durante un número de meses. A veces puede ser un reto de 21 días, un mes, o incluso tres meses. El reto consiste en consumir lo básico para vivir, pero sin excesos. Los gastos que sí se pueden respetar son la compra, las facturas del mes, la gasolina (en el caso de que se tenga un vehículo) o ropa si fuera necesario. En cambio, aquello que se pueda evitar a toda costa como las comidas en restaurantes caros, artículos aleatorios que no sean necesarios en ese momento y otras rutinas que pueden minar poco a poco la cartera de los consumidores es lo que habría que eliminar definitivamente.

Para diferenciar un poco los días que sí tienen más gastos de los que no, estos líderes mediáticos suelen colorear los días en los que no han sido 'tan buenos' en rojo y aquellos en los que han cumplido con su objetivo en verde, pero esto es cuestión de gustos.