El parkinson es una enfermedad neurológica y degenerativa que afecta en España a unas 140.000 personas. No tiene cura pero sí tratamientos farmacológicos y terapias rehabilitadoras que mejoran los síntomas, los cuales no son iguales ni en la misma intensidad en los pacientes.

Los primeros síntomas pueden aparecer hasta 10 años antes y normalmente son los motores los que suelen aparecer primero (lentitud del movimiento, inestabilidad, riguidez...) y también el temblor, aunque este síntoma tan asociado al parkinson no aparece hasta en un 30% de los afectados.

El Hospital Vall d'Hebron en Barcelona ha participado en un ensayo clínico de fase III internacional cuyos resultados son más que esperanzadores. El estudio sostienen que una "nueva terapia con el fármaco 'levodopa' mejora el control de los síntomas motores en pacientes con Parkinson".

El estudio multicéntrico, publicado en la revista 'The Lancet Neurology', ha demostrado la eficacia y seguridad de la terapia ND0612, que consiste en la administración de 'levodopa' por vía subcutánea, mediante una pequeña bomba implantada bajo la piel.

Entre las opciones terapéuticas de los pacientes con Parkinson, que sufren movimientos involuntarios e incontrolados y fluctuaciones en su estado motor, están el 'levodopa' oral, que no es efectivo en todos los pacientes, y técnicas invasivas como la estimulación cerebral profunda.

"La infusión subcutánea ofrece unos niveles más constantes"

Los investigadores, con el objetivo de encontrar alternativas menos invasivas para tratar el Parkinson, han analizado datos de 243 pacientes con esta patología de más de 100 centros comparando la eficacia de la infusión subcutánea durante todo el día con la del 'levodopa' oral.

El doctor Jorge Hernández-Vara, neurólogo de Vall d'Hebron, ha indicado que los resultados del estudio muestran que "la infusión subcutánea ofrece unos niveles más constantes del medicamento", casi dos horas más sin movimientos involuntarios respecto a la toma de 'levodopa' oral.

Además, ha precisado que esta diferencia se debe a que, en el caso del 'levodopa' oral, "los niveles de fármaco que hay en la sangre varían y esto provoca que los síntomas no estén siempre controlados".

El estudio también ha observado que los pacientes tratados con ND0612 podían hacer mejor las actividades de la vida diaria, como comer, vestirse, lavarse o escribir. El doctor Hernández-Vara ha añadido también que "la terapia con ND0612 permite una aproximación individualizada en el tratamiento de los pacientes con Parkinson" por lo que, tal como concluye, es "una buena alternativa antes de considerar otras opciones con cirugía mucho más invasivas".