Productos en auge

Las 5 ventajas de los autobronceadores y las cabinas de aerosol, las formas más saludables de estar morenos sin tomar el sol

Los detalles Las clínicas de bronceado en aerosol han afianzado en España en los últimos años, así como el uso de autobronceadores tópicos. El motivo es que existe una mayor concienciación sobre el daño que produce la sobreexposición a la radiación ultravioleta. Os explicamos cómo funcionan.

Una persona quemada por el solUna persona quemada por el solFreePik

Cada vez somos más conscientes del daño de la exposición solar prolongada en nuestra piel y en nuestra salud. Según datos de la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (Stanpa), en los últimos cinco años el consumo de protectores solares ha aumentado un 55 %. Y es que la relación entre la sobreexposición a la radiación ultravioleta y el cáncer de piel está documentada científicamente desde comienzos del siglo XX.

El cáncer de piel es una de las patologías oncológicas con mayor crecimiento en España. Según las últimas estimaciones del Observatorio del Cáncer de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), en 2024 se diagnosticaron 20.854 nuevos casos de cáncer de pielen España y la incidencia del melanoma no deja de crecer: se estima que en 2025 serán diagnosticados 9. 400 nuevos casos, según la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN).

Sin embargo, en este tipo de cáncer, la prevención es clave, especialmente desde la infancia, ya que las quemaduras solares en la infancia aumentan el riesgo de cáncer de piel en la edad adulta. De ahí la importancia de protegernos bien del sol y saber aplicar correctamente las cremas solares, especialmente en verano. En este artículo '5 claves de los dermatólogos para evitar quemaduras' explicamos cómo hacerlo.

Cabinas de aerosol y autobronceadores tópicos

Si queremos estar bronceados o morenos, la solución ya no está en tomar el sol: existen tratamientos seguros que hacen que nuestra piel se broncee. De hecho, las clínicas que bronceado en aerosol han aumentado en los últimos años, así como el uso de autobronceadores que han cambiado totalmente en los últimos años: ya no dejan ese tono y feo anaranjado de antaño.

"Tanto las cabinas de bronceado por aerosol como los autobronceadores tópicos tienen un objetivo común: ofrecer un tono bronceado a la piel sin necesidad de exposición solar", afirma a laSexta Laura Redondo Flórez, profesora de Farmacología en la Universidad Europea.

"Desde el punto de vista de la seguridad dermatológica, ambas opciones son válidas y mucho más recomendables y saludables que la exposición directa al sol, ya que no implican radiación UV. La elección entre una cabina o un autobronceador manual dependerá del tipo de piel, las preferencias personales, la tolerancia a ciertos ingredientes y la destreza en la aplicación", añade la experta.

El ingrediente principal, la dihidroxiacetona (DHA)

Las cabinas de aerosol pulverizan de manera uniforme una solución autobronceadora (generalmente a base de dihidroxiacetona o DHA) sobre todo el cuerpo mediante una especie de 'ducha seca', lo que permite una cobertura rápida y homogénea. Esta tecnología, advierte Redondo Flórez, "ha ganado popularidad por su practicidad y resultados inmediatos".

De hecho, cada vez son más los centros de este tipo que abren en nuestro país, dejando atrás las cabinas de rayos UVA, que han demostrado ser "altamente perjudiciales para la salud, según advierten desde la Academia Española de Dermatología (AEDV): "La radiación ultravioleta provoca modificaciones en el DNA celular y estas alteraciones provocan cáncer", explican.

La dihidroxiacetona (DHA), el ingrediente activo más común de las cabinas de aerosol y los autobronceadores tópicos, actúa únicamente en la capa más superficial de la piel, en el estrato córneo y ahí, explica la farmacéutica, "reacciona con los aminoácidos presentes para formar melanoides, pigmentos de tono marrón que generan el efecto bronceado".

Por su parte, los autobronceadores tradicionales, disponibles en los formatos habituales cremas, geles, espumas o sprays, se aplican manualmente sobre la piel: "Las fórmulas actuales han evolucionado considerablemente. Hoy en día, contienen ingredientes como la eritrulosa, que, combinada con la DHA, mejora el tono final y aporta un bronceado más progresivo, uniforme y natural", añade Redondo Flórez.

Los autobronceadores son seguros

"Sí, el uso continuado de autobronceadores es seguro, siempre que se apliquen de forma adecuada", asegura la farmacéutica. "No existen evidencias suficientes que indiquen riesgos para la salud humana, incluso cuando se utilizan de forma regular, una vez por semana durante todo el verano, que es el tiempo aproximado que dura el bronceado que proporcionan sobre la piel. De hecho, inicialmente la DHA fue aprobada como colorante alimentario, por lo que su consumo es completamente seguro".

Ahora bien, para conseguir el efecto deseado, es importante usarlos correctamente y seguir algunas recomendaciones básicas para optimizar su uso y evitar efectos no deseados. "Por ejemplo, es preferible no aplicarlos sobre piel irritada o lesionada, y si se opta por fórmulas en aerosol, se debe evitar inhalar el producto, asegurando una buena ventilación o utilizando protección respiratoria durante la aplicación".

Además, subraya la experta que "para mantener un bronceado uniforme y duradero, es importante hidratar bien la piel entre aplicaciones, lo que también previene la descamación irregular".

5 ventajas dermatológicas

Por último, según enumera Redondo Flórez, las ventajas que ofrecen estos productos son los siguientes:

1. Los autobronceadores ofrecen la posibilidad de lucir un tono bronceado sin necesidad de exponerse al sol, lo que representa una gran ventaja desde el punto de vista dermatológico.

2. Al evitar la radiación ultravioleta, se reduce significativamente el riesgo de fotoenvejecimiento prematuro, responsable de las manchas cutáneas y la pérdida de elasticidad.

"Las radiaciones UV generan la degradación del colágeno y la elastina, proteínas que se encuentran formando la malla de sostén de nuestra piel, la dermis", detalla la experta.

3. Disminuyen de manera significativa la aparición de cáncer de piel, ya que estos productos no generan radicales libres ni provocan daño en el ADN celular, a diferencia de las radiaciones UVB. No causan quemaduras ni alteraciones en la respuesta inmunológica de la pie.

4. Mejoran visiblemente el aspecto estético sin efectos secundarios relevantes.

5. Permiten ajustar la intensidad del bronceado de forma gradual y controlada modificando el tiempo de exposición, según las preferencias de cada persona.

"Este tipo de productos permite conseguir un tono saludable y favorecedor sin asumir los riesgos que conlleva la exposición al sol. "Por eso, son una opción especialmente adecuada para personas con la piel muy clara, antecedentes de cáncer de piel o afecciones dermatológicas que se agravan con la radiación solar, finaliza Redondo Flórez.