Jesús Tomillero, exárbitro de fútbol, ha dejado su trabajo por los ataques homófobos que sufre tras hacer pública su orientación sexual.

En Más Vale Tarde asegura que "no hay vuelta atrás hasta que el Comité de árbitros, por lo menos, no me llame o haya policía en los terrenos de juego".

Explica que sabía que hacer pública su homosexualidad podía traer estas consecuencias pero afirma que con este caso puede "ayudar a muchos árbitros que están detrás del armario que no quieren decir lo que son".