"¿Recordáis la película de 'Cuatro bodas y un funeral'?", pregunta Valeria Ros a sus compis de Zapeando, y adelanta que desde Sudáfrica ha llegado una historia "inspirada en su título". Y, es que, un hombre decide que el mejor momento para pedirle matrimonio a su novia es en el funeral de su padre.

"La joven estaba llorando a moco tendido a su padre cuando se encuentra al chaval hincando rodilla", describe la escena la vasca, que no sabe si la chica se dejó poner el anillo porque aceptaba o porque quería que se acabara esa situación tan incómoda. Por su parte, Dani Mateo prefiere sacar la parte positiva de esta pedida: "Pues podrían casarse ahí mismo porque los invitados ya están ahí reunidos y se ahorran el cura, el catering y las flores", asegura.