Marisol es una de las afectadas por la venta de los pisos del IVIMA en Madrid a un fondo de inversión llamado Encasa Cibeles, que han hecho que las condiciones de sus contratos cambien de pagar 170 euros a 450.

Un total de 3.000 personas afectadas que podrían quedarse en la calle si no pagan el triple del precio estipulado por el nuevo propietario, el cual pertenece al gigante 'Goldman Sachs'.

Los inquilinos esperan impacientes la respuesta del Ayuntamiento para una solución ocupacional a los desahucios, pero la resolución parece no llegar nunca a las familias. "Somos muchos en la lista y la vivienda no llega, y hasta que no llega no me puedo marchar", dice Marisol en laSexta Noche.

"Llevamos así seis años, con angustia, depresión e insomnio. Lo estamos pasando fatal, es un calvario y una injusticia", aclara la portavoz cuando recuerda cómo el Gobierno de Esperanza Aguirre les dio las llaves de estas casas para más tarde, según ella, quitárselas.

Además, aclara que lo de la solución habitacional no es cierta, y que solo unas pocas personas de los miles de afectados han tenido esta suerte. "Otras, con el desahucio en la mano, han ido al Ayuntamiento y llevan dos años y más esperando una vivienda", dictamina.

A la pregunta sobre su relación con las autoridades políticas y qué solución les dan al problema, Marisol explica que se reúnen continuamente, como asociación de afectados, con los partidos políticos. "El PP nunca ha querido reunirse con nosotros", comenta.

"Los demás partidos intentan ayudarnos, como el PSOE que dijo que se iba a personar a la Fiscalía del Estado como acusación particular, pero los jueces no les han dejado. Ciudadanos nada, son unos veletas", concluye.

Y es que nadie avisó a estos cientos de familias de que sus viviendas pasarían a otro propietario y que sus condiciones cambiarían a los pocos años. "Nos llegó una carta diciendo que estas viviendas públicas pertenecían a Encasa Cibeles, y, cuando investigamos, nos dijeron que era 'Goldman Sachs'", explica.