Es la tercera vez que intentan desahuciar a Rosi Santiago. Los dueños de su edificio, entre ellos un fondo de inversión, quieren echar a todos los inquilinos. Rosi lleva 20 años pagando puntual su alquiler pero no le renuevan el contrato, sin negociar, sin alternativas

Rosi cuenta qué es lo que le dijeron para echarla de su casa: "Que esto no era un barrio para pobres, que nos teníamos que ir , que los pisos habían subido mucho y a mí me dijeron que iban a hacer pisos turísticos".

De los 34 pisos que tiene este edificio, cuatro ya están desalojados y tapiados, pero todavía quedan más de 15 familias a las que les quieren subir el alquiler de 400 a 1.700 euros.

Los desahucios por alquiler ya casi duplican a los desahucios por impago de hipotecas, según el último informe del Consejo General del Poder Judicial. El aumento del precio del alquiler es una de las claves.

"En una situación económica no de manera boyante como la que nos encontramos, muchas familias no tengan recursos económicos para pagar esos alquileres que son mucho más altos que antes" explica Aner Uriarte, juez decano de Bilbao.

Pero los expertos también hablan de otras causas, como la compra de edificios para especular, de grandes fondos de inversión o los llamados desahucios invisibles.

"Es un procedimiento por finalización de contrato, es decir, no te dejan pagar y te echan de tu casa y tu como inquilina estas en completa indefensión. La ley no te ampara en absoluto" explica Ana Sánchez, portavoz del Sindicato de Inquilinas.

Se abre directamente un proceso de desahucio. Como le ha sucedido a Rosi. Con las maletas preparadas para la próxima fecha de ejecución. El 15 de febrero afrontará su cuarto desahucio.