Las calles y casas de Ciudad Pegaso representan a la perfección la historia de la pérdida de la industria de España. Construida en los tiempos de la autarquía franquista, aquí vivían los obreros de la mítica fábrica estatal de camiones, como el abuelo de Barbara Durán, que hoy intenta recuperar la memoria de aquella fábrica de la dictadura y de un barrio que era todo para ellos. 

"Tenían cine, tenían piscina. Tú ves otros barrios obreros de la época y son unas instalaciones impensables", comenta esta mujer en el vídeo sobre estas líneas. Sin embargo, en realidad eso era lo único que relucía, porque los obreros estaban asfixiados en jornadas de 16 horas diarias y las horas extras pagadas era un invento que todavía no había llegado del futuro. 

Por todo ello, explica Bárbara, "se unieron y empezaron una lucha legal muy larga para coger las casas en propiedad". Recuerda que hubo especial tensión cuando reclamaron sus derechos: "Hubo gente, entre ellos mi abuelo, que fue a la cárcel, y ahí ya el barrio se unió porque al final lo que estaban exigiendo eran cosas que necesitaban todas las familias".