La explosión de contagios COVID por la variante ómicron está provocando grandes dramas en muchas casas. La razón: menores que han dado positivo en coronavirus pero cuyos padres no están contagiados. ¿Qué se hace en estos casos? ¿Hay que ir a trabajar? La diferencia la marcan las vacunas. Por ejemplo, el caso en que un menor ha dado positivo y los progenitores negativos pero sin vacunar.

Según el Ministerio de Sanidad, todas las personas que tienen contacto estrecho con un positivo y no cuentan con la pauta vacunal completa tienen que guardar cuarentena (siete días), así que no irán a trabajar y podrán quedarse en casa cuidando del menor. Pero ¿y si el pequeño es positivo y los padres negativos con la pauta vacunal completa? Aquí se complica la cosa. Según la última actualización de Sanidad, los adultos no tienen que guardar cuarentena, así que deben ir a trabajar.

Pero ¿con quién dejan al menor si no tiene tíos o parientes cercanos que no estén en riesgo como los abuelos? ¿Tienen la opción de pedir la baja? Pues mientras sean negativos o no tengan síntomas, no. Por ley. Otra cosa es que un médico considere que te tengas que quedar en casa. Entonces, ¿qué opciones hay? Tres; primera: cogerse vacaciones; segunda : solicitar una excendencia (por el cuidado de hijos, pues lo contempla el estatuto de los trabajadores); tercera: acogerse al plan' Me Cuida'.

Este proyecto lo puso en marcha el Gobierno de coalición en la primera ola de la pandemia y permite teletrabajar e incluso solicitar una reducción de su jornada. Se llega así a la conclusión de que, con un menor positivo, un no vacunado tiene más facilidades que un vacunado. Una incoherencia que, como mínimo, debería revisarse.