Los milenials, aquellos que nacieron entre 1981 y 1993, están modificando algunas 'reglas' básicas de la sociología y la política. La sociedad está cambiando, y la novedad es que están rompiendo una de las normas básicas de la política: esa que dice que si no eres de izquierdas cuando eres joven, es que no tienes corazón; que si lo sigues siendo de adulto, es que no tienes cabeza. Traducción práctica de esta cita sin autor: con la edad se va votando a opciones más conservadoras. Como decimos, la realidad está variando: los milenials están rompiendo esta tendencia.

En Reino Unido, mientras generaciones anteriores se han ido haciendo más conservadoras con la edad, la curva de los nacidos entre los 80 y el 2000 no ha dejado de desplazarse hacia las opciones más progresistas: más de diez puntos hacia la izquierda entre los mismos votantes cuando tenían 20 años, y ahora con 40. Lo mismo pasa en Estados Unidos. La diferencia es que los milenials, hasta los 30 años, sí que eligieron opciones más conservadores, pero volvieron a posiciones de izquierdas a los 40.

En España, lo que ha ocurrido es que los milenials se han vuelto lo que podríamos llamar "más moderados"; volviendo un poco al bipartidismo, pero en ningún caso haciéndose más de derechas. Aunque cada país tiene sus propias explicaciones internas, hay factores comunes: ¿por qué los milenials de entre 30 y 40 años están rompiendo la tendencia? Las sucesivas crisis los han marcado. Muchos siguen atrapados en la precariedad.

"Los principales eventos que han ocurrido en su vida son dos crisis económicas muy seguidas. La gran recesión de 2008 y la pandemia de COVID-19. Esto puede haber condicionado que estén algo más a la izquierda que otras generaciones anteriores. Recordemos que hubo un tiempo en España en el que la gente joven conseguía empleo de manera muy sencilla, y otras generaciones ahora solo han conocido crisis", ha explicado el politólogo Pablo Simón.

Otra explicación para que la tendencia se incline hacia la izquierda, para que no se hayan derechizado como las generaciones anteriores. Ahora influyen nuevos elementos además del bolsillo, tal y como explica Simón: "Los jóvenes en España quieren trabajo, sanidad, vivienda... pero también son pro derechos LGTBI, feminismo, ecologismo... No ven contradicción entre esos dos elementos. Si hay sectores a la derecha que impugnan algunos elementos que tienen que ver con valores, esto genera una contrareacción y, por temas culturales, los jóvenes se van a la izquierda".

Y una última en forma de pregunta: ¿esta tendencia hacia la izquierda la van a seguir las nuevas generaciones? La Z, por ejemplo, que es la generación de los que tienen ahora menos de 30 años. Así lo ve Simón: "No sabemos cómo evolucionarán los jóvenes del futuro. Los nuevos votantes, en Andalucía o Madrid, están prefiriendo a Ayuso y a Moreno Bonilla. Las generaciones que vienen por detrás pueden reenganchar otra vez con el bipartidismo".