Equipo de Investigación ha hablado con Diego Hidalgo, exanciano de los testigos de Jehová, que ha contado cómo son los denominados comités judiciales: "Es un juicio, pero no exactamente como los juicios que hacen en este mundo, allí no hay abogado. El culpable está solo ante el peligro".

Hidalgo detalla por qué alguien puede ser llamado a un comité judicial: "Actos de maldad serían homicidio, conducta sexual inapropiada, conducta relajada, apostasía, borrachera, hurto, robo, mentir deliberada y maliciosamente, no abstenerse de la sangre...".

Laia Santander, extestigo de Jehová, pasó por tres comités judiciales: "Yo llegaba a la sala y me encontraba con tres hombres, ancianos, frente a mí, me hacían todo tipo de preguntas".

En primer lugar, le juzgaron "por inmundicia" y así recuerda lo que pasó: "Aunque no había habido relaciones sexuales, con mi pareja nos habíamos sobrepasado en las muestras de cariño en cuanto a lo que la doctrina de Testigos de Jehová estipula".

El segundo tribunal le juzgó "por conducta relajada". Según relata, es "en el momento en que te sobrepasas de lo que es un noviazgo honorable que se llama en la congregación, cuando te quitas ropa e incluso mandas fotos eróticas".

Denuncia que es un señalamiento público y que en ese momento se siente "repudia y vergüenza".

En enero de 2018 fue juzgada por última vez "por inmoralidad sexual" porque "había tenido relaciones sexuales fuera del matrimonio" y consideraban "una inmoralidad sexual o fornicación". Finalmente, Laia Santander fue expulsada.

Ahora, ella califica los comités de "una violación en todo concepto de los derechos humanos básicos" y añade: "Es muy difícil para alguien que está dentro identificar y darse cuenta de que en realidad pertenece a una secta coercitiva de alto control mental".