El considerado por muchos como 'el perro más adorable del mundo' ha muerto de un infarto a los 12 años. Su fallecimiento lo han afirmado en Instagram sus dueños.

En una publicación en la que adjuntan multitud de imágenes de Boo, sus dueños confirman su muerte: "Nos ha dejado mientras dormía, nuestra familia está desconsolada".

"Desde que arrancó la página de Facebook de Boo, él alegró a muchas personas que compartieron sus historias. Llevó la alegría e hizo que la gente se riera con su personalidad y su peculiar forma de mover la cola", añaden.

Desde 2006, los dueños de Boo compartieron en las redes sociales fotografías del animal, acompañado frecuentemente de su otro perro: Buddy. Sin embargo, poco después de la muerte de Buddy, Boo comenzó a tener los primeros problemas de salud.

"Creemos que su corazón se rompió literalmente cuando Buddy nos dejó. Aguantó y nos dio más de un año. Pero parece ha llegado su momento", aseguran los dueños.