Yevette Vásquez es una mujer y madre soltera que vive en Fort Worth, Texas (EEUU), junto a sus tres hijos. Días atras, cuando llevaba a uno de ellos al colegio, se dio cuenta de que en la entrada del centro había muchos coches.

Era el día de 'Donuts con los padres', según le indicó Elijah, su hijo. Por ello, Yevette decidió volver rápidamente a casa. "No podía dejar que él se lo perdiera", explica la mujer en una publicación en su cuenta de Facebook en la que cuenta lo sucedido y que acompaña con unas fotos del evento.

"Sé que ver a otros papás con sus hijos no es fácil para él, pero así es la vida. Al menos, puedo hacer lo que haga falta para poner una sonrisa en su cara, así que allá va", añade Yevette para explicar su gesto: decidió disfrazarse de hombre para que su hijo pudiera disfrutar del acto organizado por su colegio.

En las fotos, un sonriente Elijah posa junto a su madre, que lleva una gorra azul, bigote postizo y una camisa de cuadros azules. A juzgar por las imágenes, el recién estrenado, aunque temporal, aspecto de su madre fue la mejor estrategia para degustar esos donuts.

"Por favor, no me odiéis. Sé que soy una mujer y también lo saben mis hijos", termina escribiendo la mujer. Sin embargo, nada está más lejos del odio que las reacciones que su gesto ha suscitado. Desde enhorabuenas varias a los dos protagonistas de la historia a muchas alabanzas es lo que sí que ha recibido a cambio de este cambio de aspecto lleno de humor y de amor.